Denuncia de “mala praxis” en el desamiantado del cine Urgell
Los vecinos piden a las administraciones que se impliquen
Una veintena de vecinos del antiguo Cine Urgell de Barcelona, en el Eixample, denunciaron ayer “mala praxis” en las obras de retirada de la cubierta de amianto de la sala, de 2.000 metros cuadrados, y reclamaron mayor implicación al Ayuntamiento, la Agencia de Salud Pública y la Generalitat. La asociación Vecinos de la manzana del Cine Urgell y otros afectados por el amianto pidieron más protección para los vecinos en el proceso de desamiantado.
La portavoz de la asociación, Lena Martí, informó de que la segunda fase del desamiantado está acabando y que el pasado jueves se detectó “una manipulación incorrecta de placas y una excesiva acumulación de estas”. “Los supervisores vigilan que los trabajadores estén protegidos, pero no hay ningún tipo de protección explícita legal que ampare a los vecinos o a terceros”, añadió Martí.
El seguimiento del plan de trabajo lo está realizando la consultora ACM-2020, también responsable del análisis ambiental en estaciones y túneles de metro de Barcelona, y en el último informe el supervisor, Lluís Mallart, ya sugirió incorporar una cubierta estática, pero los responsables lo denegaron por un problema técnico.
Tras unos retrasos en las obras de más de dos años, Martí denunció que la propietaria y la constructora han programado unos plazos para llevar a cabo el desamiantado en verano, en unas condiciones de sequedad ambiental que favorecen la dispersión de partículas. “Queremos destacar que este es un problema que afecta a muchos barrios de Barcelona y estamos luchando para que salga a la luz y se hagan eco las autoridades”, y que “debe ser considerado un problema de salud pública”, manifestó Martí.
