Leo Nucci, el barítono que ha hecho suyo Rigoletto, se estrena en Les Arts

Nada más entrar, llena la sala con su presencia. Saluda a los periodistas, bromea. Es una auténtica institución en el mundo de la ópera, aunque Leo Nucci asegura que no es "ninguna estrella". Ha interpretado más de 500 veces Rigoletto, para muchos, como el director Roberto Abbado, la "ópera más perfecta" de Verdi. Fue el primer barítono que hizo un bis en el Teatro Real. Hace 10 años, los aplausos de la gente y del propio coro hizo que repitiera el dueto Si vendetta, tremenda vendetta, con Patrizia Ciofi. En 2015, volvió a repetir la hazaña, esta vez con la soprano Olga Peretyatko. "¡Qué locura, la de Madrid, qué locura!", decía esta mañana el barítono italiano en el Palau de les Arts, donde el próximo sábado estrenará, a los 77 años, un nuevo montaje de la obra de Verdi. 

Será el estreno del barítono en el coliseo valenciano (actuará también el 14 de mayo) dirigido por su amigo Roberto Abbado. La dirección escénica corre a cargo de Emilio Sagi en esta coproducción de la ABAO y el Teatro São Carlos de Lisboa de Rigoletto, un "ideal de unión dramatúrgica y musical". "No hay ni una sola palabra que se pueda sacar ni añadir" en una obra cercana que inspira "muchas emociones", añadió Abbado.

Destacó también la importancia de las notas, porque cada una "tiene su sentido y su importancia". "Si empiezas a contar los números de los compases, las proporciones, las estrofas y ves que está todo calculado, te quedas con la boca abierta, porque todo es parte de un proyecto, lo escuchas y es lo más natural y simple, parece una compoaisicón de Bartók", ha señalado.

El director musical ha sostenido que el espectador conecta "muy bien" con el personaje de Rigoletto, un bufón que a través de la "ironía sarcástica" se burla de los dolores del resto y que muestra su faceta más humana al ver en peligro a su "tesoro", su hija.

Por su parte, Nucci dijo que esta obra es "la otra cara de la moneda" de Víctor Hugo, en cuya obra teatral está basada la ópera. "No es una opera para banalizar el canto, hay demasiados lugares comunes en el mundo de la ópera. En estas funciones vamos a hacer dos pequeñas cosas. En muchas funciones he actuado como Rigoletto banalizando la profundidad. Aquí, la humanidad de los personajes sale y eso es importante; espero que demos un ratito de emoción el sábado", señaló el artista.

Después de tantas representaciones, que con los ensayos y pruebas suman más de 2.000, Nucci aseguró que cada noche su representación es diferente, porque "la transformación del personaje es la propia evolución del hombre" y resaltó la importancia de "vivir el momento trágico y sufrir" con el personaje.

El intérprete boloñés ha cimentado una de las carreras más longevas del panorama lírico mundial. Estrechamente vinculado a la Scala de Milán, el barítono es un caso único de presencia durante más de tres décadas en el templo milanés, donde ha intervenido en más de 200 funciones en más de veinte títulos, con compromisos también en la presente temporada.

Por su parte, Sagi detalló que la puesta en escena es "muy simple y arquitectónica" y que ha jugado con una paleta de colores muy sencilla, con negro, gris, blanco y rojo, que se completa con un vestuario "abstracto".

La propuesta escénica de Sagi transcurre en una atmósfera sombría, para destacar la teatralidad de la obra y la soledad en la que viven los personajes, "incomunicados y obsesionados". Además, incluye una rampa que se transforma en virtud de los diferentes cuadros y un suelo que se va desmenuzando para simbolizar la corrupción, de manera que en el último acto ya solo queda un trozo de tierra bajo los pies de los cantantes.

Cinco funciones en Les Arts

La obra se estrenará en Les Arts este sábado y continuará en cartel los días 14, 17, 19 y 22. En las dos primeras funciones, Nucci interpretará a Rigoletto, mientras que las tres últimas correrán a cargo de Vladímir Stoyanov.

El reparto está formado por Celso Albelo como el Duca di Mantova; la soprano Maria Grazia Schiavo, que regresa a Les Arts 13 años después, que será Gilda; y el quinteto protagonista lo cierran el bajo italiano Marco Spotti (Sparafucile) y la 'mezzosoprano' georgiana Nino Surguladze.

El elenco se completa con las voces de Gabriele Sagona (Monterone) y de los cantantes del Centre Plácido Domingo: Marta Di Stefano, Alberto Bonifazio, Mark Serdiuk, Arturo Espinosa, Olga Syniakova, Pau Armengol y Juliette Chauvet.