_
_
_
_
Opinión
Texto en el que el autor aboga por ideas y saca conclusiones basadas en su interpretación de hechos y datos

Sobre enemigos y aliados

Ximo Puig y su muchachada despliegan su maestría en nadar y guardar la ropa y la opción de un pacto con el Cs de Albert Rivera y Toni Cantó sobrevuela el escenario

Amparo Tórtola
Debate en los cinco candidatos a la presidencia de la Generalitat en la SER.
Debate en los cinco candidatos a la presidencia de la Generalitat en la SER.MÒNICA TORRES

Si un político de la vieja escuela y de colmillo retorcido como Alfonso Guerra afirma taxativamente que en política “no hay enemigo que no pueda llegar a ser aliado, ni amigo que no pueda ser traicionado”, hay que concederle, al menos, el beneficio de la duda. Reconocer que algunas experiencias habrá vivido para formular, a la edad en que uno tiende a hacer balance, tal aforismo, recogido en su libro Una página difícil de arrancar, subtitulado Memorias de un socialista sin fisuras(Planeta, 2013).

Aproveché las vacaciones navideñas para sumergirme en su lectura. Subrayé la sentencia citada porque intuí que futuros acontecimientos me devolverían a ella. Así ha sido.

A lo mejor yo soy de piel fina, pero en los días que llevamos de campaña he advertido que la desconfianza se ha acomodado entre los socios del Pacto del Botánico a cuenta de las futuras alianzas que, en previsible ausencia de mayorías absolutas, deberán negociarse tras la jornada electoral del 28-A.

La suspicacia irradia desde Unides Podemos-Esquerra Unida y Compromís hacia el PSPV-PSOE. Las tres fuerzas suscribieron en 2015 un acuerdo que ha dado estabilidad al Consell durante los cuatro años de legislatura. Las dos primeras, por boca de sus aspirantes presidenciales, Martínez Dalmau y Mónica Oltra, han dejado clara su apetencia por repetir jugada. Con matices. Podemos evitará el juvenil error de quedarse a la intemperie, sin cartera de gestión. La coalición nacionalista aspirará al mando en otros departamentos del Consell que aseguren un mayor control de los dineros —Hacienda— y menos quebraderos de cabeza que los derivados de asumir un área tan compleja como Educación.

¿Y el PSPV-PSOE? ¡Ay! Los socialistas valencianos se dejan querer. Crecidos por unas encuestas que les otorgan la vitola de virtuales ganadores tras lustros de triunfos del PPCV, Ximo Puig y su muchachada despliegan su maestría en nadar y guardar la ropa. La opción de un pacto con el Cs de Albert Rivera y Toni Cantó sobrevuela el escenario. Que sea improbable no significa que sea imposible. Hagan juego, señores.

Destacados dirigentes socialistas nacionales —rama histórica del PSOE— se afanan en no desautorizar a Guerra: el enemigo puede ser un aliado y al amigo, que le den. ¿Alguien duda que los poderes económicos, esos ejecutivos del IBEX que en 2018 se embolsaron de media 4,23 millones de euros —79 veces más que sus empleados— están deseosos de bendecir el enlace? Ya tienen preparado el arroz para cubrir de blanco las cabezas de Pedro Sánchez y Albert Rivera. Este último es cum laude en la nada sutil materia de donde dije digo, digo Diego.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Hace unos días falleció en Tepito (México) Lourdes Ruiz, la reina del albur. El albur es un juego de palabras que siempre llevan doble sentido. Sus promotores lo han elevado a la categoría de ajedrez o esgrima mental. Sin menosprecio de la fallecida, por aquí andan emboscados unos cuantos que le disputan el título. Hasta que las urnas hablen.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_