Ximo Puig quiere abrir un centro de la memoria en la cárcel de Miguel Hernández

El presidente de la Generalitat valenciana y candidato del PSPV-PSOE a la reelección, Ximo Puig, ha anunciado este domingo que quiere convertir la antigua prisión de Benalúa, en la ciudad de Alicante, en un centro para la “memoria democrática”. El lugar tiene valor simbólico porque fue donde murió de tuberculosis, el 28 de marzo de 1942, el poeta oriolano Miguel Hernández, encarcelado por el régimen franquista tras finalizar la Guerra Civil.

“Queremos un lugar en el que tener todos los documentos que tienen que ver con la represión, con la dictadura y con los años de la Transición y que se convierta además en un espacio permanente de exposiciones, reflexión y encuentros internacionales sobre la memoria”, ha explicado Puig ante el monumento que se alza frente a la cárcel en recuerdo del autor de Nanas de la cebolla. “Sin memoria no puede haber reconciliación”, ha añadido el dirigente socialista.

La vieja prisión, levantada en el año 1900, funciona ahora como Palacio de Justicia de Alicante. La Generalitat prevé empezar a construir en breve un nuevo edificio judicial en la ciudad. Un proyecto que cuenta con un presupuesto de 53 millones de euros. Cuando la nueva sede judicial esté terminada, la antigua cárcel pasará a alojar el Instituto Valenciano de Memoria Democrática, los Derechos Humanos y Libertades Públicas y su centro documental. Hasta ese momento, ha indicado Puig, el nuevo centro de la memoria se ubicará en la Casa de las Brujas de Alicante, que es la actual sede de Presidencia de la Generalitat en la ciudad.