Rusiñol, estrella de la feria de anticuarios
El pintor retrató en 1889 a Enric Clarasó en el estudio que compartían, el primer Cau Ferrat, una obra que sale a la venta en FAMA
Formaban un trío de amigos unidos por su pasión por el arte, pero también por la vida bohemia. Ramon Casas, Santiago Rusiñol y Enric Clarasó fueron tres de los artistas más reputados del panorama artístico de la Barcelona de comienzos del siglo XX. Vivieron experiencias juntos, expusieron a la vez (sobre todo en la sala Parés) y, en el caso de Rusiñol y Clarasó, compartieron taller, en concreto en el número 38 de la calle Muntaner. En este lugar está ubicada la escena de la obra Clarasó en su taller, pintada por Rusiñol en 1889 en la que se ve al escultor modelando en barro una de sus esculturas femeninas, rodeado de yesos clásicos y moldes de escayola en un espacio lleno de luminosidad.
La obra, que colgó durante muchos años en el salón de la Villa Sant Francesc de Sarrià de Clarasó sale a la venta, después de permanecer casi inédita en durante tres décadas —se vio en 1969 en la Sala Parés y luego en 2005, un par de meses, en el Museo Diocesano— en la próxima edición de Feria de Arte Moderno y Antiguo de Barcelona (FAMA) que se celebra entre el 6 y el 10 de marzo en la Drassanes de Barcelona.
“Se trata de una gran obra del Modernismo”, explica Gabriel Pinós, director de la galería Gothsland que mostrará esta pintura, una de las más destacadas de la feria de este año, según destacó ayer el presidente de FAMA, Sergi Clavell, durante su presentación.
Y lo es no solo por la calidad de la pieza, de 175 por 114 centímetros, sino por lo que representa. “En este taller guardó durante unos años Rusiñol su importante colección de forja que expuso en la Exposición Universal de Barcelona un año antes, el primer Cau Ferrat, que no trasladaría a Sitges hasta 1893. La localidad la descubrió cuando viajaba a visitar La Anunciación del Greco a la Biblioteca-Museo Víctor Balaguer de Vilanova i la Geltrú”, prosigue Pinós que no duda en asegurar que la obra “es digna de un museo como el MNAC”. Incluso la visualiza junto a algunos de los retratos y autorretratos de los artistas que hicieron posible el arte moderno en Cataluña que ocupan toda una de las salas de este museo.
Rusiñol no estará solo en la quinta edición de FAMA. Le acompañarán obras realizadas por artistas como Joan Miró (que firma también la pintura más cara de la edición de Arco que se celebra en Madrid), Alexander Calder, Manolo Valdés y Ricardo Opisso, entre otros, además de otros miles de piezas anónimas; pinturas, mobiliario, joyas, esculturas, cerámicas, libros y muebles, desde el siglo XII y comienzos del siglo XX. Las ponen a la venta 29 galerías de toda España (aunque 22 de ellas son de Barcelona).
Entre las obras que destacarán la semana próxima, una pintura anónima que representa una batalla naval en el Báltico de 1808 (galería Nautilus), una Biblia Noble de Lutero de 1768 (Anticuaria Astarloa), un mueble lacado de época Carlos IV (Antiguitats Serra Planas); un colgante Art Decó formado por aguamarina y brillantes (Joyas Antiguas River) y un capitel de la dinastía nazarí del siglo XII (Antigüedades Altabella), que es la pieza más antigua de la feria.
Otras de las obras expuestas serán: Proyecto boceto exposición de Miró en Barcelona (Jordi Pascual) y Tête (Lorenart), ambas de Miró; Jugadores de naipes, de Mariano Fortuny (Galería Sant Sadurní), un paisaje acuático de Sorolla (Lorenart); Red Octopus, de Calder (David Cervelló); Perfil sobre fondo naranja, de Manolo Valdés (David Cervelló) o La Masía, de Joaquim Mir (Jordi Pascual).
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.