Díaz Ayuso y Martínez-Almeida, los candidatos del nuevo PP en Madrid, defienden el pasado del partido
El aspirante a la alcaldía promete una vuelta a las políticas neoliberales con "un plan de desregulación sin precedentes" en la Administración local
El PP de Madrid ha celebrado este domingo "el cambio y la regeneración" que dicen que ha traído al partido su presidente nacional, Pablo Casado, con un multitudinario acto en el teatro Goya. En la presentación de los candidatos a la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y a la alcaldía de la capital, José Luis Martínez-Almeida, se ha hablado de "modernidad" y de una "nueva generación" de líderes, pese a que sus discursos se han llenado de referencias al pasado del PP y a sus líderes más conservadores. Ese ha sido el caso de Martínez-Almeida, que ha recordado a los "mejores alcaldes" de la capital: Álvarez del Manzano, Ruiz Gallardón y Ana Botella. Y también el de Díaz Ayuso, que ha reivindicado la herencia de los Gobiernos autónomos de Ruiz-Gallardón, Esperanza Aguirre, Cristina Cifuentes y Ángel Garrido. Así se desenvuelven los nuevos aspirantes populares, dos "pata negra" del PP, según Casado. Defendiendo el pasado de su partido, pleno de éxitos económicos y casos de corrupción, para garantizar que en el presente es el "muro de contención contra el comunismo y el populismo".
Casado apuesta por un Madrid que sea "banco de pruebas" de las políticas neoliberales
Pablo Casado quiere que Madrid vuelva a los tiempos en que la ciudad y la región eran un "banco de pruebas" de las políticas neoliberales. El presidente del Partido Popular ha defendido que "liberalizar y flexibilizar es tener menos Gobierno y más sociedad". Su apuesta es —como lo fue para Esperanza Aguirre, orgullosa participante en el acto que se ha celebrado en el teatro Goya— consolidar la educación concertada y la privatización de la sanidad, y para lograrlo, está dispuesto a reeditar en Madrid el pacto de Andalucía.
"Pagas impuestos para decidir sobre los que tienen que estar a tus órdenes y a tu disposición", ha dicho Casado.
Madrid será, según José Luis Martínez-Almeida, el candidato municipal, "la palanca de cambio" para que Pablo Casado llegue al palacio de La Moncloa. El líder popular ha coincidido en que Madrid es una plaza clave para el partido donde espera que los candidatos defiendan sus "principios centenarios: la libertad, la propiedad privada, el libre mercado, la seguridad y la defensa de la nación".
Más de 500 personas se han agolpado en el teatro Goya mientras otras tantas se han quedado fuera. Todos han acudido al reclamo de Casado, el antiguo líder de las Nuevas Generaciones madrileñas. Sin embargo, la ovación más sentida del mediodía ha sido para Ángel Garrido, que se ha fundido en un abrazo con el líder nacional, como si no haber logrado la candidatura autonómica no le hubiera abierto una herida de las que nunca cicatrizan. El público ha escuchado hablar a Pío García Escudero, el presidente interino del PP de Madrid, pero en realidad esperaba a Almeida, a Díaz Ayuso y a Casado.
El nuevo PP ha defendido lo que defendía el viejo PP. "La libertad y el individuo", ha proclamado la candidata autonómica, en plena sintonía con Casado. Y Martínez-Almeida también ha seguido ese hilo argumental.
En su discurso de presentación, el candidato municipal ha anunciado que si logra la alcaldía pondrá en marcha "un plan de desregulación sin precedentes" en la Administración local. El portavoz del grupo municipal madrileño diseñará también una bajada de impuestos si gana las elecciones del próximo 26 de mayo. "No es el Ayuntamiento quien tiene que decir hacia dónde se va", ha asegurado. "Quiero un Madrid más libre, en el que las políticas del PP se centren en las personas. Que todos y cada uno de los 3.200.000 madrileños puedan hacer lo que quieran", ha proclamado, y ha añadido que el gobierno municipal se debe limitar a "hacer acompañamientos".
Nada de eso ha levantado al público de sus asientos. Ese momento ha quedado reservado para cuando Martínez-Almeida ha enarbolado una foto. En ella se ve a la alcaldesa de la capital, Manuela Carmena, junto al expresidente y al exvicepresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont y Oriol Junqueras, y al exconseller Raül Romeva. "En Madrid no volverá a producirse esta foto, no permitiremos que ningún gobierno vuelva a humillar a la capital de España recibiendo a tres golpistas en el palacio de Cibeles. Manuela, se acabó, se te ha acabado el tiempo", ha afirmado con tono mitinero el candidato. Y el público ha estallado en aplausos.
Esa ha sido también la línea argumental de la candidata a presidir la Comunidad de Madrid. "Madrid, o es del PP, o es de la izquierda. Somos el muro de contención de esa izquierda", ha dicho Díaz Ayuso. "Quiero lanzar dos compromisos", ha añadido, "el primero, con los jóvenes madrileños. Y el segundo, con España".
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