Una empresa de basuras sufragó un acto electoral del PSC en Sabadell
El Grupo Vendex, adjudicatario de la recogida de residuos en la ciudad, pagó los 100.000 euros del evento
Seis años después del estallido del caso Mercurio, que destapó la corrupción generalizada en el Ayuntamiento de Sabadell, la juez ha descubierto indicios que apuntan a la presunta financiación irregular del Partit dels Socialistes (PSC) en esa localidad. El Grupo Vendex —adjudicatario, a través de su filial Smatsa, del concurso de recogida de basuras en Sabadell— sufragó en 2011, pocas semanas antes de las elecciones municipales, los 100.000 euros que costó un acto electoral del exalcalde de Sabadell Manuel Bustos.
Las supuestas irregularidades en la adjudicación a Smatsa del servicio de recogida de basuras en Sabadell han destapado una de las tramas con más recorrido del caso Mercurio, que a finales de 2012 supuso la defenestración de Bustos como alcalde. Tras la investigación de los Mossos, la juez Beatriz Faura ha citado a declarar a 18 personas, incluidos Bustos y varios exconcejales (dos lo siguen siendo) del PSC, así como los responsables del grupo empresarial.
Entre 2009 y 2012, “altos cargos” del Ayuntamiento y del Grupo Vendex “constituyeron un grupo organizado” de intercambio de favores, según el auto judicial. Encabezada por Francisco Bustos —concejal de Espacio Público y hermano del entonces alcalde—, la trama “facilitaba y garantizaba la adjudicación de servicios públicos” a las empresas ligadas a Vendex a cambio de contraprestaciones. Fue así como una de esas compañías, Smatsa, se hizo con el servicio de recogida y tratamiento de basuras del consistorio en 2012, lo que le reportó “un importante beneficio económico”. En concreto, 283 millones de euros por 15 años.
La adjudicación fue fruto de un “amaño”, dice sin ambages la magistrada: los responsables políticos impulsaron los “actos necesarios” para que Smatsa resultara vencedora. La empresa, de hecho, pudo participar en la elaboración de los pliegos, o sea de los requisitos técnicos del concurso, de modo que partió en una posición de ventaja sobre sus competidores.
Pero los favores se pagan. El Grupo Vendex sufragó “viajes” a funcionarios del consistorio, colocó en sus empresas a esos mismos funcionarios y a “sus familias y amigos” e incluso “anuló multas” de aparcamiento (se da la circunstancia de que Vendex también gestionaba la zona azul de Sabadell). En el plano político, la magistrada asegura que el grupo empresarial también pagó “actos o eventos de entidades vinculadas o participadas por el Ayuntamiento de Sabadell”, así como del PSC.
La resolución no entra al detalle de esas supuestas contraprestaciones, salvo en un caso. El 30 de abril de 2011, el PSC organizó un acto de campaña en Sabadell. Manuel Bustos se presentaba una vez más —sería la última— como candidato a alcalde en las municipales de ese año. El acto fue “financiado de forma ilícita” por Vendex, que hizo un “desembolso de unos 100.000 euros” que “no fue contabilizado ni fiscalizado ni declarado legalmente”, añade el auto. Los organizadores trataron de “encubrir” los gastos y lo contabilizaron a título particular o a nombre de empresas ligadas a ello; por ejemplo, la sociedad Migas y mucho más SL, propiedad de Francisco Bustos.
La juez ve indicios de varios delitos: tráfico de influencias, prevaricación, violación de secretos, cohecho, falsificación documental, fraude electoral y blanqueo de capitales. Y ha solicitado a otros ayuntamientos socialistas —Montcada y Barberà del Vallès— que informen sobre los concursos con Vendex y sobre los viajes de algunos de sus funcionarios que supuestamente pagó la empresa.
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