El supervisor de los Mossos nombrado tras el 155 deja su puesto

La persona designada por el Ministerio del Interior para intervenir a los Mossos d’Esquadra, Juan Antonio Puigserver, se despidió el lunes del equipo del Departamento de Interior. “Vino por la mañana, recogió las cosas del despacho y por la tarde se fue en el AVE”, explican fuentes de Interior.

Puigserver ha estado casi siete meses al frente de Interior. Esas mismas fuentes aseguran que ha tenido un trato afable con las personas del departamento que dirigía el ahora encarcelado Joaquim Forn. El secretario general técnico del Ministerio solía pasar dos o tres días a la semana en Barcelona, donde ocupaba el despacho del secretario general de Interior, César Puig, también destituido e imputado en la Audiencia Nacional. La semana pasada se celebró en Madrid la última reunión de coordinación con los Mossos, según otras fuentes consultadas.

Por ahora es una incógnita quién dirigirá a la policía catalana. Todas las quinielas apuntan a Miquel Buch, alcalde de Premià de Mar y presidente de la Asociación Catalana de Municipios y Comarcas (ACMC). Un lugar especialmente delicado es el puesto de director de Mossos, que dejó Pere Soler, también imputado, en cuanto se aplicó el artículo 155 de la Constitución.

El nuevo presidente de la Generalitat, Quim Torra, insinuó en su discurso de investidura la posibilidad de restituir a las personas cesadas, entre ellas el mayor Josep Lluís Trapero, imputado también en la Audiencia Nacional. Hasta ahora, fuentes de su defensa han negado siempre cualquier voluntad del exjefe de los Mossos de regresar mientras siga en un proceso judicial. El comisario Ferran López sigue estando al mando de los Mossos desde que lo designase el Ministerio del Interior.