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El PSOE se aleja de un acuerdo presupuestario con Carmena

Los socialistas admiten su decepción por el incumplimiento de los acuerdos de 2017 y abogan por una posición de intransigencia ante los recortes

Concejales del grupo del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid.
Concejales del grupo del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid. Carlos Rosillo

El PSOE muestra ya su rechazo a los presupuestos de Manuela Carmena para 2018. Fuentes socialistas revelan a EL PAÍS que, tras el incumplimiento del año pasado de los acuerdos, la postura del partido socialista será esta vez más contundente. El PSOE rechaza los recortes de 240 millones de euros que el Consistorio debe ejecutar para cumplir con el Ministerio de Hacienda, y ataca la gestión del ejecutivo local al considerarla "deficitaria". Sin los votos de los socialistas, al equipo de Ahora Madrid solo le quedaría pedir el respaldo del PP. De no ser así, la gestión se vería gravemente afectada.

En la formación socialista dan prácticamente por hecho su negativa a aceptar los nuevos presupuestos municipales. Fuentes del partido revelan que la alcaldesa Manuela Carmena está al corriente de la situación: "Los presupuestos de este año no los vamos a aprobar", aseguran dirigentes socialistas y subrayan que, aunque exista tiempo para "llegar a un acuerdo", las "concesiones" serán muy importantes.

De momento, ni siquiera existe un borrador sobre el que poder negociar, pero para los socialistas el incumplimiento de los acuerdos del año pasado pesa enormemente. "Esto de 100 millones de modificaciones presupuestarias y que no lo cumplan se acabó", advierten fuentes del partido en referencia a los proyectos de cambio que no se llevaron a cabo en empleo, ayudas a la pobreza energética, cultura y urbanismo, entre otros. Ante la hipótesis de otro año marcado por la inejecución presupuestaria, los socialistas están dispuestos a desmarcarse.

Tras la intervención de Hacienda el año pasado, el gobierno de Carmena tuvo que prorrogar las cuentas de 2018. Además, para cumplir con Cristóbal Montoro, se ha comprometido a recortar las cuentas de este ejercicio en 240 millones, lo que ha suscitado el rechazo del PSOE. Si Ahora Madrid no logra obtener el visto bueno del PSOE, no podrá sacar adelante las cuentas. Esto retrasaría la puesta en marcha de decenas de proyectos.

La previsión de marzo

El área de Economía del Ayuntamiento está sumida en un proceso de reorganización. En diciembre, Carmena destituyó al delegado Carlos Sánchez Mato por su negativa a aprobar el plan de ajuste, y nombró a Jorge García Castaño. A pesar de las dificultades en redactar un nuevo documento presupuestario, el gobierno confía en que en marzo se llegue a un acuerdo. Y asegura que el programa de Ahora Madrid se cumplirá y que las inversiones se recuperarán del remanente de Tesorería.

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Sin embargo, también en este punto, el PSOE discrepa. Solo el año pasado el gobierno local asumió recortes por 546 millones que afectaron a mejoras en infraestructuras, equipamientos y servicios públicos. Carmena negó la existencia de estos "recortes", pero los socialistas exigieron que admitiera la gravedad de las correcciones. Por ello, acabaron votando en contra del plan económico y financiero (PEF) para 2017 y 2018 en diciembre. Y ahora creen que las nuevas cuentas son una continuación de aquel pacto con Cristóbal Montoro, apoyado en el pleno solo por el PP.

"Que aprueben ahora las cuentas con el PP, tal y como hicieron con el PEF", sostienen los socialistas. Por su parte, en el PP calificaron de "muy difícil" un acuerdo con Ahora Madrid, aunque su portavoz José Luis Martínez-Almeida esgrimió algunas condiciones para lograr un entente, como reducir las subvenciones "a dedo" y bajar los gastos de propaganda.

Para el PSOE, no obstante, la cuestión atañe no solo a la credibilidad del equipo de Carmena, sino también a su falta de solidez. Cree que el enfrentamiento en la coalición formada por Podemos, IU, Ganemos y Equo es ya insalvable. "De los 19 ediles, solo cuatro o cinco están con la alcaldesa", sostienen, y agregan: "Ella [Carmena] está cansada y Ahora Madrid se va a disolver".

En opinión de los dirigentes del PSOE, el acercamiento electoral ha escenificado los conflictos latentes de esa coalición. Una parte de Ahora Madrid exige primarias abiertas para la lista electoral de 2019. La alcaldesa y Podemos, en cambio, abogan por introducir una lógica más vertical, que facilite revalidar una alcaldía clave para el partido de Pablo Iglesias.

En junio de 2015, el partido de Pedro Sánchez dio su apoyo a Carmena para revertir una política municipal marcada por 20 años del PP. Pero ahora la decepción es palpable. Por ello, los socialistas también descartan formar parte del ejecutivo municipal para facilitar un cambio de rumbo: "Definitivamente no vamos a entrar en el gobierno".

Mayor dificultad para mover dinero de una partida a otra

Las cuentas municipales de Madrid se encuentran ahora en una situación de prórroga presupuestaria, después de que el año pasado el gobierno local no lograra redactar un nuevo plan para 2018. En este escenario se repite el planteamiento económico del año anterior, es decir, que el gasto previsto no puede superar los 4.700 millones de euros y será más difícil avanzar en nuevos proyectos de inversiones no contemplados en 2017. En cuanto a los proyectos plurianuales, el Ayuntamiento podrá mantener el planteamiento de 2017, pero tras cuadrar las cuentas con los 240 millones de recortes que debe acometer por el incumplimiento reiterado del techo de gasto en 2015 y 2016.

Cada modificación en la contabilidad municipal deberá, sin embargo, pasar por controles internos (de la asesoría jurídica y de la Intervención General). Las trabas burocráticas complican considerablemente mover dinero de varias partidas, lo que dificultaría la gestión municipal en un año clave para el gobierno de Ahora Madrid, con las elecciones previstas hacia mayo de 2019.

Entre los proyectos más relevantes, se encuentran la remodelación de Gran Vía y la Plaza de España; la mejora de calles y zonas ajardinadas; la creación de carriles bicis en varios ejes urbanos y la construcción de equipamientos en todos los distritos. De no alcanzar un acuerdo con el PSOE, será más difícil para Ahora Madrid realizar estas obras prometidas en campaña electoral.

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