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Una Diagonal de dos velocidades

Los comercios del tramo central ven cómo los transeúntes prefieren el lado mar al de la montaña

Cristian Segura
Transeúntes en la avenida Diagonal de Barcelona.
Transeúntes en la avenida Diagonal de Barcelona.Juan Barbosa

¿Tiene más afluencia de transeúntes la acera de números pares, la de montaña, de la Avenida Diagonal? Marta Canut atiende la pregunta a pie de calle frente a su tienda de moda, La Bul, en la Avenida Diagonal esquina Francesc Macià; para responderla, Canut pide al periodista que observe durante un rato el recorrido de la vía en sentido Besòs; la respuesta es evidente: por la acera de montaña pasean muchas más personas que por la de mar.

Los comercios confirman que el tramo central de la Diagonal sufre un desequilibrio en su desarrollo. “Esto sucede en todo el mundo: las calles o las aceras donde toca el sol son las que salen más beneficiadas y transitadas”, explica Canut, expresidenta de la Asociación Diagonal Barcelona. La cuestión es que cuando cae el sol el número de peatones continúa siendo más elevado en el lado de montaña. Siempre ha sido así, en parte por el polo de vida que era la calle Tuset, añade Canut.

“Es una tendencia durante todo el día, por la inercia, y me atrevería a decir que en una proporción de 6 a 4”, apunta Rafa Navarro, gerente del establecimiento de decoración y cafetería Doméstico, en la Diagonal con Enrique Granados, en el lado mar. Doméstico tiene dos tiendas en esta acera y compite con empresas más grandes como Hábitat o Zara Home, les dos en el lado de montaña. “En la otra acera es donde están las marcas más conocidas”, afirma Navarro. “En el lado de montaña no habría copisterías de 24 horas, por ejemplo, y sí que están en el lado de mar. En la acera de montaña también hay más cafeterías, es evidente que hay más afluencia de público”, explica Juan, encargado del cine Boliche.

Estadísticas de 2016 del Ayuntamiento de Barcelona indican que el tramo de la Diagonal entre Francesc Macià y Paseo de Gracia tiene 32 módulos de terrazas, de las cuales 22 son en la acera de montaña. El desequilibrio es más evidente si se tiene en cuenta que la superficie de la acera de mar es de 13.347 metros cuadrados y la de montaña, de 10.703 metros cuadrados, un 19% menos.

Al lado del Boliche, la empresa turística Barceló abrió el pasado enero unas oficinas de su agencia de viajes B Travel, en las que se organizan conciertos o exposiciones. El equipo responsable de las actividades culturales de B Travel son conscientes que se benefician de tener el local en la acera de montaña y coinciden con el gerente de Doméstico que la proporción de afluencia entre los dos laterales es de 6 a 4. En B Travel avisan que ello se demuestra en el precio del metro cuadrado, más elevado en la acera de montaña.

Así lo corroboran los análisis de mercado de la consultora inmobiliaria Ascana. Según Ascana hay tres horquillas de precios en el tramo central de la Diagonal: el recorrido de la acera de números par —la de montaña— entre Francesc Macià y Muntaner tiene un precio de alquiler comercial de entre 65 y 80 euros mensuales por metro cuadrado; el resto de la acera par oscila entre 45 y 65 euros. El alquiler de la acera impar —la de mar— cuesta entre 40 y 60 euros el metro cuadrado, según Ascana.

Inditex decanta la balanza

Eduardo Rivero, socio fundador de Ascana, descarta que el factor de que toque el sol más horas en la acera de montaña sea determinante. La prueba es que pasado Francesc Macià en sentido Llobregat, la acera de mar es más transitada y la razón, explica Rivero, es que allí se han instalado marcas y centros comerciales potentes.

El hecho diferencial del tramo central de la Diagonal es la apuesta de Inditex por la acera par, dice Rivero. Las marcas de Inditex Zara, Zara Home, Massimo Dutti, Oysho y Uterqüe se concentran en el espacio más cotizado de la acera de montaña. A Inditex la siguieron las marcas de Mango, según Rivero. “El lado de mar necesita que se establezca lo que llamamos una locomotora, una gran marca que atraería otros comercios, por ejemplo una marca como Ralph Lauren podría ocupar el antiguo edificio de Winthertur de Francesc Macià”, señala Rivero.

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Sobre la firma

Cristian Segura
Escribe en EL PAÍS desde 2014. Licenciado en Periodismo y diplomado en Filosofía, ha ejercido su profesión desde 1998. Fue corresponsal del diario 'Avui' en Berlín y en Pekín. Desde 2022 cubre la guerra en Ucrania como enviado especial. Es autor de tres libros de no ficción y de dos novelas. En 2011 recibió el premio Josep Pla de narrativa.

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