José Manuel Franco arrasa en las primarias a nuevo secretario general del PSOE-M

Franco tendió la mano a los afiliados tras conocer su aplastante victoria sobre el resto de los candidatos. “Mi equipo lo componen los 15.000 militantes del PSOE”, afirmó. En total, se emitieron 7.538 votos, de los cuales 12 fueron nulos (0,16%), 155 en blanco (2,01%) y 7.548 válidos (97,99%), según anunció ayer en rueda de prensa la presidenta del comité de ética del PSOE de Madrid, Marisa Mercado, con el 100% de los sufragios escrutados.

La escasa participación fue la única sombra sobre estas elecciones. En unos comicios en los que todos los aspirantes pretendían conseguir una gran movilización de las bases, solo votó el 50% del censo de afiliados. Aun así, se superó el 42,6% que se alcanzó en las primarias de las que salió elegida la anterior secretaria general, Sara Hernández, en 2015 (obtuvo el respaldo de 3.693 militantes, un 57,7% de los votantes). En esta ocasión, Hernández decidió retirarse de la carrera y apoyar a Franco.

El respaldo de los alcaldes de los grandes municipios y de referentes del socialismo ha sido determinante en la victoria de este gallego de 60 años con una larga trayectoria política. Franco, que coordinó la campaña de Pedro Sánchez en las primarias (el secretario general del PSOE obtuvo el 49,5% de los votos en Madrid, frente al 31,8% de su rival Susana Díaz), logró el apoyo también de los partidarios de Patxi López y Susana Díaz. En Leganés, el respaldo a su candidatura alcanzó el 93% de los sufragios, en Móstoles el 71,59%, en Fuenlabrada el 82% y en Alcalá de Henares, el 60%.

Licenciado en derecho, durante 22 años ha ejercido de diputado y se ha mantenido en la ejecutiva de personalidades tan dispares como Rafael Simancas y Tomás Gómez. Durante la gestora que relevó a la ejecutiva de Gómez, tras ser destituido por Pedro Sánchez, entre febrero y julio de 2015, fue portavoz en la Asamblea de Madrid.

Con los abrumadores resultados de ayer no es necesaria una segunda vuelta de las primarias, que hubieran sido necesarias en caso de que ningún candidato hubiera conseguido superar el 50% de los votos. Al ganador le espera ahora el 13º congreso, de donde saldrá la lista para renovar el comité ejecutivo del partido, que dirigirá a los socialistas madrileños.

Franco tiene la difícil misión de encontrar hueco para todas las familias que existen en el partido. El cónclave tendrá lugar del 20 al 22 de octubre. Los delegados de las diferentes agrupaciones darán el visto bueno a la selección, que tiene como reto aunar a todas las corrientes.

En la rueda de prensa celebrada después de conocerse los resultados oficiales, Franco tendió la mano a sus dos adversarios y a los militantes que no le han votado. A la comparecencia asistieron los otros dos candidatos, la todavía secretaria general, Sara Hernández, y el presidente del PSOE de Madrid, Manuel Robles. Franco sostuvo que todos son necesarios “porque somos demasiados pocos para prescindir de algunos. Es la única forma de ganar a la derecha”, afirmó.

El nuevo líder del PSOE madrileño aludió también a la unión en las agrupaciones, que “tienen que aglutinar y no dividir”. “Este es el principio de un camino que nos va a llevar a conquistar las instituciones”, subrayó.

Lobato, el segundo clasificado, se mostró muy orgulloso del 20% de votos conseguido, que “han votado un proyecto diferente”, dijo. Ofreció todo su apoyo a Franco para diseñar un “partido moderno”. González Jabonero, que tan solo obtuvo el 8,49% de los sufragios, también se mostró dispuesto a secundar el trabajo del nuevo equipo. En su opinión, el “primer reto” del nuevo secretario general debería ser conocer la razón por la que la mitad de los afiliados han preferido “quedarse en casa”. El lunes se proclamará de forma oficial a Franco en su nuevo cargo.