Carmena reduce un 23% la partida para nuevas instalaciones deportivas

El Ayuntamiento de la capital, dirigido por Manuela Carmena (Ahora Madrid), ha reducido en un 23,5% los fondos que había presupuestado a principios de año para nuevas instalaciones deportivas. La modificación de gasto, que supone 2,8 millones de euros, afecta a nuevas pistas de atletismo, piscinas y otras instalaciones cuyas obras tendrían que comenzar en 2017. La corrección presupuestaria deja a disposición del Ayuntamiento nueve millones en lugar de los 11,8 millones previstos. El Consistorio alega que las modificaciones son "habituales" y que todas las instalaciones van a ser realizadas.

Prácticamente la mitad de los 35 nuevos proyectos de ámbito deportivo previstos para este ejercicio han sufrido una reducción de presupuesto. Se trata, en concreto, de actuaciones en 12 distritos donde el equipo de Carmena tenía pensado levantar nuevos centros o ampliar las instalaciones de los ya existentes. En Arganzuela, por ejemplo, el Consistorio tiene previsto construir una nueva pista de atletismo. El presupuesto inicial ascendía a 200.000 euros, pero tras las modificaciones se quedará en 80.000. En Moratalaz, el recorte de fondos asciende a 220.000 euros para construir canchas de pádel, nuevos vestuarios y oficinas. En San Blas el recorte será de 320.000 euros para dos instalaciones deportivas. Y así en Cuatro Caminos, Ensanche de Vallecas y Las Rosas, entre otros.

Uno de los centros afectados es el de Cerro Cabezuelo, en Vallecas, que pierde 100.000 euros, el total de la inversión prevista para construir una piscina. Sus responsables describen los problemas que padecen: "En principio esperábamos que hicieran un campo de fútbol, luego hablaron de una piscina, pero es un lío...". El club de fútbol ahora se entrena en un campo de tierra y tiene "equipamientos obsoletos", afirma. El Consistorio prometió edificar una piscina, reclamada por los vecinos del barrio.

El director general de Deportes del Ayuntamiento, Javier Odriozola, sostiene que en la mayoría de los casos las reducciones de presupuesto no afectan a los proyectos cuya ejecución está fijada para 2018 y 2019. Menciona, como ejemplo, el polideportivo de La Cebada. En esa actuación, considerada una de las más importantes del gobierno de Ahora Madrid, que pretende dotar al distrito Centro de un polideportivo, el Ayuntamiento ha restado 280.000 euros de los 400.000 previstos. Quedan para gastar unos 120.000 euros, que según Odriozola son suficientes para iniciar el proyecto, cuya ejecución es plurianual: debería estar acabado en 2019.

"Lo importante es que haya una cantidad de dinero suficiente para empezar", insiste el dirigente municipal, quien por otro lado destaca que las modificaciones de partidas para obras nuevas son competencia del Área de Economía, dirigida por Carlos Sánchez Mato. Un portavoz de esta área afirmó este lunes que "las 35 nuevas instalaciones deportivas previstas van a ser realizadas" y que "ningún proyecto se ha abandonado". En concreto, detalla que "algo más de dos millones se computan en el presupuesto del próximo año". "Se trata de un ajuste de calendario totalmente habitual en las obras de patrimonio, y está relacionado con los tiempos administrativos y con cuestiones técnicas".

La oposición niega esta versión. El PP cree que de los 35 proyectos de equipamientos deportivos presupuestados "tan sólo se ha invertido en el de Fuencarral-El Pardo". Los populares sostienen que esas modificaciones presupuestarias no son habituales y reflejan dificultades del equipo de gobierno. El portavoz del PP, José Luis Martínez-Almeida, cree que los datos subrayan la "incapacidad de gestión de Carmena" y vaticina que el Consistorio repetirá "la misma película de terror que el año pasado, cuando [los concejales de Ahora Madrid] fueron incapaces de ejecutar el presupuesto". También señala al PSOE, que apoyó los presupuestos de Carmena, como "corresponsable del desastre".

Este año, según datos de junio, el presupuesto ejecutado para nuevas instalaciones deportivas alcanza sólo el 1%. Pero el Área de Economía sostiene que los ritmos son mayores que el año pasado. Cifra el presupuesto total de 2017 para instalaciones —la suma de las nuevas obras y las reformas de las existentes— en casi 34 millones (de los que 1,9 son con cargo a los presupuestos y 31,8 a las inversiones financieramente sostenibles).

El Consistorio niega, por otro lado, que el dinero retirado del presupuesto para instalaciones haya entrado a formar parte de los fondos congelados por la retención de créditos de Hacienda. "Se procedió a realizar los acuerdos de no disponibilidad requeridos, buscando fórmulas totalmente legales para financiar por otras vías las inversiones inicialmente previstas", afirmó el sábado una fuente autorizada del Consistorio. El año pasado, el Ayuntamiento gastó 230 millones más de los permitidos. Esa política le ha obligado este año a tener que congelar 238 millones de sus cuentas para cumplir con los objetivos de estabilidad.