Un antihomenaje (o casi) al teatro musical
El teatro Rialto acoge 'Olviden Broadway', un particular espectáculo lleno de humor
Cada verano desde 2014 se celebra en Barcelona la Nit de Musicals, un concierto que reúne a unos cuantos profesionales del teatro musical. "Supone una gran fiesta para los artistas y los amantes de este género", explica Marc Vilavella, actor, cantante y director, que participó en la edición de 2015. Vilavella se ha propuesto traer ese espíritu a Madrid. Por eso ha reclutado a varios profesionales afincados en la capital para dar forma a Olviden Broadway, un recital teatralizado con canciones de musicales, algo más canalla e irreverente que su hermano mayor barcelonés. Por ahora será un concierto único el 10 de julio a las 21 horas en el teatro Rialto en el número 54 de la Gran Vía. (Entradas entre 12 y 15 euros).
"Hacemos una especie de falso antihomenaje al musical", sostiene Vilavella. Se ha propuesto, junto al resto del equipo creativo, que completan Sara Pérez, guionista, y Felipe Forastiere, director musical, "jugar con los musicales, cortar, pintar y colorear", añade.
Esa intención lúdica se traduce en un continuo cruce de referencias, melodías y situaciones de todo tipo de títulos de la historia del teatro musical. "Vamos a hacer versiones y perversiones, cogeremos personajes de diferentes obras, los descontextualizaremos y los mezclaremos", continua el director, quien triunfó el año pasado con el musical neoyorquino El despertar de la primavera, en la ciudad condal.
Esos personajes, encarnados en seis actores, interpretarán clásicos del género con un toque diferente. "Cantaremos El Rey León sobre la instrumentación de La Bella y la Bestia", anuncia Sara Pérez, quien además de haber ideado el guion, interpreta varios temas en este delirio escénico.
El humor y la pasión por el género lo impregna todo. Los gatos de Cats sufrirán problemas vocales por las bolas de pelo y las bestias de la sabana aullarán sin control. "Pero también habrá momentos de gran virtuosismo", añade Pérez.
Su voz, y la de las otras dos intérpretes femeninas, Mariola Peña y Laura Enrech, serán las responsables de llegar a las notas más agudas de las populares partituras. Ramón Balach y Lean Zanardi aportarán el contrapunto masculino. Un elenco que ya ha demostrado su solvencia artística en Hoy no me puedo levantar, Spamalot, Los Miserables o el mismo Rey León. Una pequeña banda de música formada por el director musical, Forastiere, al piano, Fani Fortet a la batería y Nico Quintela en el bajo, acompañarán a los cantantes. También habrá un coro de ocho voces y varios invitados sorpresa como Solange Freyre, artista finalista del programa de televisión Got Talent. dentro de este espectáculo realizado por La Coja Producciones y Laboratorio de la Voz, la productora de Jorge Javier Vázquez.
Las melodías de Broadway no serán las únicas en el repertorio. Piezas de musicales nuevos estrenados en España también resonarán para recordar a todo el mundo la gran diversidad del teatro musical. "Queremos homenajear a la gente que ha arriesgado aquí, como la compañía Dagom Dagoll y su Mar i cel o Pegados, un musical que se ha traducido a varios idiomas y que ha ganado un Max", explica Vilavella que en 2012 dirigió Lo llaman copla, un espectáculo que aglutinaba algunos de los éxitos de ese género, que también estará presente en Olviden Broadway. "Parece que en nuestra cabeza solo está la referencia de Broadway o el West End y aquí ya empezamos a tener un poquito de tradición. Tenemos zarzuela, copla y cuplé, que tiene mucha teatralidad, que forma parte de nuestro ADN escénico", completa.
Las cuestiones que se plantea un artista cuando decide dedicarse al mundo del espectáculo y que ejemplifica tan bien Mamá quiero ser artista y el intemporal legado de Shakespeare completan el muestrario de temas. "Hay muchos musicales inspirados en las obras del inglés, nosotros queremos mostrar lo mejor de esos dos universos con West Side Story y Romeo y Julieta, por ejemplo", añade el director sobre este concierto con el que sus creadores se han propuesto no ponerse límites. "Siempre está ahí el miedo a hacer algo rompedor pero nosotros hemos querido hacer algo supercanalla y reivindicativo que contenga todos los sentimientos que despierta una obra en directo" cuenta Sara Pérez.
Esta amalgama libérrrima nace con vocación de permanecer en el tiempo, aunque por ahora se conforman con una puesta de largo en la Gran Via madrileña. "Por eso decimos eso de olviden Broadway, no es que renunciemos a la meca del musical. al contrario, muchas gracias por todo, pero también tenemos lo nuestro", concluye su director.
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