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La acusación pide 36 años de cárcel para un periodista de Lugo por abusar de sus hijas y difundir sus fotos

Según el abogado de la madre, el caso "pone de manifiesto lo abyecto y perverso a lo que puede llegar un hombre con sus niñas"

P.S. llega con la cabeza cubierta a la Audiencia.
P.S. llega con la cabeza cubierta a la Audiencia.

La acusación particular, en representación de la madre de las víctimas, y la fiscalía de Lugo piden respectivamente 36 y 33 años de prisión para P.S., un periodista natural del municipio lucense de Foz que lleva desde 2015 ingresado en la cárcel de Teixeiro por el caso que ahora se juzga, el supuesto abuso sexual sobre sus dos hijas de 4 y 5 años. La sección segunda de la Audiencia Provincial celebra las sesiones a puerta cerrada. P.S., reincidente en este tipo de delitos, está acusado también de distribuir material pornográfico de las niñas. De los 36 años que pide el abogado de la madre, Gerardo Pardo de Vera, 24 son por los abusos y 12 por la distribución. El abogado de P.S., que residía en Ribadeo, requiere la libre absolución para lo que pedirá que se anule la prueba de las fotos y videos en el juicio que arrancaba esta mañana.

Pardo de Vera ha asegurado que este comportamiento “pone de manifiesto lo abyecto y perverso a lo que puede llegar un hombre en la relación con sus propias hijas menores de edad”. En cuanto al estado de la madre, ha acreditado que “está mal, siguiendo tratamiento, lo que es esperable en estas circunstancias, intentando superar la situación, y muy pendiente de sus hijas que ya muestran secuelas y un daño potencial que desde el punto de vista psicológico forense se producirá para el desarrollo de su personalidad”.

La acusación particular solicita 24 años de prisión por "dos delitos continuados de abusos sexuales muy agravados". La "utilización de menores para elaboración de material pedófilo", suman los otros 12. “Esperamos una condena contundente, acorde con los hechos”, ha reclamado.

El abogado ha precisado que “las circunstancias de los abusos y de las grabaciones se produjeron en el propio domicilio del acusado supuestamente, y desde allí se enviaron las imágenes y las fotografías al chat pedófilo en el que participaba”. Dice que "en torno a un año” es posible que se repitieran esos abusos. Las pruebas, según él, son "muy contundentes y muy claras; muy gráficas, por desgracia”.

El procesado, que tiene además otro hijo que no fue objeto de sus abusos, contaba con antecedentes pedófilos. Según Pardo de Vera, estos “consistieron en la utilización en internet, la difusión de imágenes de contenido sexual de menores", pero este "antecedente ya estaba cancelado”. Por esa causa, P.S. fue condenado a tres años, en 2.003, por tenencia de material pornográfico. En aquella ocasión puso como excusa que dada su condición de periodista se encontraba elaborando un libro sobre el tema.

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