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El nuevo reglamento del Parlament, a punto

Junts pel Sí y la CUP cerrarán este jueves por la tarde el acuerdo que facilitará la aprobación de la ley de ruptura

La diputada de la CUP, Anna Gabriel, este miércoles en el Parlament.
La diputada de la CUP, Anna Gabriel, este miércoles en el Parlament.Albert Garcia

La reforma del reglamento del Parlament que permitirá la aprobación exprés de la ley de ruptura ya está a punto. Este jueves por la tarde se prevé que Junts pel Sí y la CUP alcancen el acuerdo definitivo para llevar la reforma al pleno de la cámara del 14 de junio. El portazo mutuo que se han dado en los últimos días Mariano Rajoy y Carles Puigdemont cerrando el mínimo resquicio que quedaba para lograr intentar el diálogo político parece haber acelerado los trámites, de manera que las formaciones independentistas quieren disponer de esta carta cuanto antes para jugarla cuando más convenga a su estrategia.

La reforma del reglamento se está tramitando como una ley ordinaria, aunque por el procedimiento de urgencia, y en este caso todo ha transcurrido con una rapidez inusual. Tanta, que Junts pel Sí y la CUP ni siquiera permitieron que comparecieran en la comisión dos expertos que proponían el PSC y Catalunya Sí que es Pot. De esa manera se cerró la comisión en un tiempo récord y se rechazaron todas las enmiendas de la oposición.

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Superado ese trámite, el pasado martes se creó la ponencia para tramitar la ley y este jueves, apenas 48 horas después, la ponencia celebrará la que puede ser su primera y última reunión. Al tratarse de una reforma del reglamento del Parlament, el texto no volverá a la comisión, sino de que ya puede debatirse por la totalidad de los diputados. Si se cumplen esas previsiones, como todo parece indicar, el proyecto de ley de reforma del reglamento iría a la reunión de la Mesa y de la junta de portavoces del próximo día 6 para incluirlo en el pleno ordinario que se celebrará el día 14.

La clave de la reforma del reglamento es la modificación del artículo que permitirá que una proposición de ley presentada por un grupo se pueda tramitar en lectura única si así lo acuerda el Pleno del Parlament. En la práctica, eso permitirá que durante la celebración de un pleno ordinario de la cámara se pueda alterar el orden del día sobre la marcha al haber una mayoría independentista y se apruebe sin apenas debate la ley de ruptura que esconden Junts pel Sí y la CUP y que deberá servir para convocar el referéndum de independencia.

En las enmiendas iniciales de ambas formaciones secesionistas no figuraba otra modificación sustancial del reglamento que se ha introducido sobre la marcha, como es la de habilitar períodos de sesiones a partir del 15 de agosto. De esa manera no es descartable que la ley de ruptura se pueda aprobar en pleno verano y convocarse el referéndum en esas fechas.

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Los cuatro grupos parlamentarios que no apoyan al Gobierno, Ciudadanos, PSC, Catalunya sí que es Pot y PP, pusieron el grito en el cielo desde que conocieron la reforma del reglamento pero sus quejas han servido de poco. Si finalmente se aprueba el texto este jueves por la tarde para llevarlo al pleno, estudiarán si emprenden alguna medida por la vulneración de sus derechos como diputados.

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