Artur Segarra, el descuartizador de Bangkok, se enfrenta a la pena de muerte
Está acusado de secuestro, robo, extorsión y asesinato premeditado de David Bernat en Tailandia
El principal sospechoso del asesinato de David Bernat, Artur Segarra, escuchará su sentencia a primera hora del viernes en Bangkok. El español está acusado por trece delitos entre los que se encuentran el secuestro, robo, extorsión y asesinato premeditado, un delito castigado en Tailandia con la pena de muerte.
Si confiesa o colabora, algo que no ha hecho, sería un atenuante que le rebajaría la pena a cadena perpetua. El acusado, de 37 años, fue detenido el 7 de febrero de 2016 en la localidad camboyana de Sihanoukville, a donde había huido dos días antes y entregado a las autoridades un día más tarde. Segarra aguarda desde entonces en una cárcel de Bangkok y ha asegurado ser víctima de una trampa en la que implicó a su exnovia tailandesa, Pridsana Saen-ubon, quien testificó en su contra el pasado mes de diciembre.
Bernat, un empresario de 40 años y procedente de Lérida, residía en Irán y visitaba frecuentemente Tailandia. La víctima fue vista por primera vez en enero de 2016 en compañía de Segarra. Su cadáver apareció días después descuartizado, un caso que llenó las televisiones tailandesas de imágenes de los agentes transportando las partes del cuerpo halladas flotando en el Chao Phraya, el río que serpentea la capital tailandesa.
El equipo forense determinó que la víctima falleció por asfixia entre el 25 y el 27 de enero. Según la investigación, una noche después del asesinato Segarra salió en su motocicleta en dirección al río cargado con un gran paquete, donde se cree que se encontraba el cuerpo de Bernat, y regresó sin él la madrugada del día siguiente.
La policía tailandesa determinó que Segarra había planeado cuidadosamente el asesinato y probablemente fue motivado por dinero, ya que el sospechoso no tenía ninguna ocupación reconocida. Los investigadores detectaron “grandes cantidades de dinero” desde las cuentas corrientes en Singapur del español asesinado hacia otras entidades de las que Segarra era titular. El detenido fue grabado además retirando grandes sumas de cajeros automáticos en Bangkok después de la desaparición de Bernat.
Los Mossos d’Esquadra seguían la pista de Segarra desde un año antes del asesinato de Bernat por ser, supuestamente, uno de los líderes de un grupo que estafó en Cataluña un centenar de ancianos con contratos abusivos de compraventa de casas a cambio de una renta vitalicia que nunca llegaba. Cuando había planeado detenerle cuando el acusado ya se encontraba en Tailandia.
La fiscalía ha llamado al estrado a declarar a cerca de 40 personas, ninguna de ellas testigo directo del crimen, además de recoger muestras de ADN, huellas en el apartamento de Segarra, grabaciones de cámaras y extractos de cuentas bancarias que inculpan a Segarra.
De ser hallado culpable, el español aún tendrá la oportunidad de recurrir la condena ante el Tribunal de Apelaciones y el Tribunal Supremo. En última instancia, podrá solicitar clemencia a la Casa Real para rebajar el castigo, según indica la agencia EFE. El país asiático no ha ejecutado a ningún reo condenado a la pena capital desde 2009.
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