Carmena asegura que no pretende elegir a su sucesor a la alcaldía de Madrid

La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha afirmado este martes que no piensa dirigir ningún tipo de sucesión a su candidatura en 2019, cuando acabe el mandato de Ahora Madrid. Carmena ha defendido por otro lado la "importancia" de que "sigan llegando a los Ayuntamientos personas que no son políticos profesionales" y ha especificado que no piensa en nadie en particular para su relevo. Aunque sí ha reivindicado la importancia de que se "mantenga el espíritu" del proyecto político que ella está liderando.

Según la alcaldesa de Madrid, un mandato de cuatro años "no es suficiente" para generar el cambio político esperado en el Consistorio de la capital. En este sentido, ha subrayado la importancia de insistir en la "democratización" de la confluencia de fuerzas que orbita en torno a Podemos, y está formada por otras siglas como Equo, Izquierda Unida y Ganemos.

En este sentido, Manuela Carmena ha precisado que hará "todo lo posible" por "pasar el paraguas" y por conseguir "que haya la mayor continuidad entre un proyecto y la continuación del mismo". Se trata "no solo de profundizar en la cultura democrática sino hacer que esa cultura democrática pueda dar el rendimiento más eficaz y más eficiente", ha añadido.

Carmena considera "decisiva" su experiencia como alcaldesa para que el proyecto siga adelante, pero ha reiterado que no pretende tutelar ni apoyar de forma directa a ningún candidato específico. Aunque ha manifestado su favor a que en el Ayuntamiento de Madrid sigan trabajando miembros de la sociedad civil y no solo políticos profesionales.

Las voces sobre la sucesión de la alcaldesa han ido multiplicándose en estas semanas, cuando Ahora Madrid está a punto de alcanzar el ecuador en el mandato del gobierno local. Las próximas elecciones municipales se celebrarán en mayo de 2019, pero desde algunas formaciones han empezado "hojas de ruta" para buscar la fórmula para revalidar la confianza de los madrileños.

Dentro del equipo de gobierno ha ido, por otro lado, ampliándose una brecha entre un frente crítico, formado por unos ocho concejales pertenecientes a Ganemos e Izquierda Unida, y 11 ediles afines a Carmena. Hace dos semanas, la alcaldesa acordó ampliar la representación de todos los concejales en la junta de gobierno. Espera así lograr una mayor coordinación en las votaciones del pleno, donde últimamente se están escenificando las fracturas internas.

Carmena siempre ha defendido que Ahora Madrid no funciona con lógicas de partido tradicional. Sostiene que se trata de una "agrupación" de vecinos y que por lo tanto no existe el concepto de disciplina de voto propio de otras organizaciones políticas. Sin embargo, desde el sector crítico arremeten contra una supuesta dirección "personalista" del gobierno local por parte de la regidora.

Los críticos achacan a Carmena, entre otras cosas, haber cesado de forma "unilateral" a la exconcejal de Cultura, Celia Mayer, en marzo, y la semana pasada al concejal de Economía, Carlos Sánchez Mato, de la vicepresidencia de Madrid Destino.