Ayuntamiento y Comunidad estudian abrir la Finca de Vista Alegre

El Ayuntamiento de Madrid y el Gobierno regional estudian abrir al público la quinta de Vista Alegre, una joya paisajística situada en Carabanchel y perteneciente a la Comunidad. Así lo explicaron ayer tanto la Comunidad como el Consistorio, tras una visita al recinto por parte de la alcaldesa de la capital, Manuela Carmena, los concejales de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, y Medio Ambiente, Inés Sabanés, y los consejeros de Economía, Engracia Hidalgo, y Políticas Sociales, Carlos Izquierdo.

El Consistorio señaló que Calvo convocará “de manera inminente” al resto de administraciones implicadas -Comunidad y varios ministerios- para llegar a un acuerdo con el que abrir al público esta zona verde de 45 hectáreas. “Vamos a revisar el plan especial y a definir un calendario para iniciar las actuaciones lo antes posible”, dijo el concejal. "Uno de nuestros objetivos es recuperar el patrimonio de los vecinos y vecinas de Madrid. Queremos desbloquear la situación de Vista Alegre", escribió después en su cuenta de Twitter.

La Comunidad, por su parte, mostró su buena disposición: “Se trata de una primera toma de contacto para buscar propuestas para el parque”, señaló una portavoz de Economía. La mayoría de los edificios públicos incluidos en el recinto -un total de 47- pertenecen al Gobierno regional, aunque también a algunos ministerios. Entre los inmuebles, se encuentran el palacio del Marqués de Salamanca, la Residencia Militar de San Fernando -perteneciente al Ministerio de Defensa-, el Centro de Formación de la Policía -Ministerio de Interior- o el instituto público Puerta Bonita.

Esta zona verde tiene unas 45 hectáreas y posee en su interior diferentes palacetes, praderas, caminos, estatuas, fuentes, huertas y jardines. El lugar se convirtió en Real Sitio tras ser adquirido en 1831 por la reina María Cristina, esposa de Fernando VII, y más tarde perteneció al marqués de Salamanca. El declive comenzó en 1883, cuando los herederos del noble vendieron la finca al Estado. Desde entonces, el deterioro ha sido continuo.

En 2009, el Ayuntamiento, entonces gobernado por Gallardón (PP) intentó recuperar el jardín de recreo, pero su plan no convenció al Gobierno regional. En 2011, la propia Comunidad firmó un acuerdo con la Universidad de Nueva York para que instalara su sede en este inmueble, pero el proyecto tampoco se llegó a materializar.