El placer de ser odiados

“Queríamos que lo rodara Luis Cerveró, que ha trabajado para gente como Pharrel Williams”, cuenta Manu, guitarrista, “lo que no esperábamos es que íbamos a tener la misma producción. Se nos ha ido de las manos”. No es la primera vez que en un vídeo de Los Punsetes sus miembros se machacan unos a otros. Ya volaron guantazos, e incluso algún cuchillo, en discos anteriores. La novedad en este son las armas de fuego, con un final digno de Quentin Tarantino. Esta semana (el día 3 de marzo) veremos el resultado.

El quinto disco de Los Punsetes gustará a quienes les guste el grupo —que ya son legión— porque sus canciones mantienen las hechuras de siempre: guitarras tan afiladas como sus letras, bases rítmicas contundentes y la inconfundible voz de Ariadna, inmutable y capaz de sobrecoger sin tirar de aspavientos. Si acaso, este trabajo, para el que han vuelto a recurrir a la producción de El Guincho, suena un poco más inmediato y menos cocinado que el anterior. “Lo hemos grabado todos a la vez en el estudio y con poca posproducción; queríamos que lo que se oye en el disco se pudiera trasladar, tal cual, al escenario”, dice Manu, que en estos momentos se encuentra inmerso en su otro proyecto en paralelo, su álter ego Antonna.

También cambia un poco el tono de lo que cuentan en sus canciones, o más bien de cómo lo cuentan. ¡Viva!, no en vano, es un título cargado de ironía. “Tal vez el mensaje sea más amargo de lo que acostumbramos, porque no está el panorama para echar cohetes”, dice Manu. Permanece, eso sí, esa manera de soltar verdades, sus verdades, tan directa como los puñetazos de sus vídeos. “Viva el terrorismo, viva la guerra, viva tenerlo todo y echarlo por tierra” o “Viva el presidente, viva el Gobierno, gracias a vosotros van a ser eternos”, son algunos de los versos que recorren la canción. “No somos un grupo político en el sentido estricto, pero sí decimos sin tapujos lo que pensamos y lo que nos jode”, aclara Manu. “Y jamás usamos palabras malsonantes como gentrificación o empoderamiento”, puntualiza Chema.

Y eso que son conscientes de que no son buenos tiempos para no tener pelos en la lengua: “Es una vergüenza vivir en un país donde se procesa a músicos por lo que dicen en sus canciones o en sus redes sociales”, opinan, en clara referencia a casos como el del cantante de Def Con Dos.

Los temas de Los Punsetes no dejan títere con cabeza, ni siquiera en su propio gremio. Tu puto grupo, single de adelanto, arremete contra un tipo determinado de bandas de pop, aunque prefieren no dar nombres. “Hay un estilo que cada vez se extiende más y es odioso. Pero no te voy a dar ejemplos”, dice Manu, “sí te diré que hay grupos muy malos y es sano odiarlos, una costumbre que se estaba perdiendo. A nosotros nos odia mucha gente, y eso es muy gratificante”.