El conductor del accidente en el que fallecieron tres familiares da negativo en alcoholemia

El conductor del coche accidentado el pasado martes en Girona en el que fallecieron tres personas, entre ellas una niña, ha dado negativo en la prueba de alcoholemia. Los Mossos d’Esquadra están investigando qué pudo llevar al turismo a no coger la curva y a precipitarse por un barranco de siete metros de altura. Todo apunta a que podría haber sido una suma de factores. Una vez se haya analizado el vehículo que se ha recuperado en la mañana de este miércoles del barranco y se haya interrogado al padre, los agentes decidirán si se le acusa o no un delito de homicidio imprudente. En el coche, de cinco plazas, viajaban siete personas. Las tres niñas que sobrevivieron permanecen ingresadas en el Hospital Trueta de Girona y el padre ya ha sido dado de alta.

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El siniestro tuvo lugar sobre las 20.30 horas en la estrecha carretera que rodea el pantano de Susqueda, al final de una larga bajada que acaba en una curva muy pronunciada a la derecha y que pasa por encima de un puente sin vallas. La vía, que estaba húmeda, es la que lleva del vecindario del Coll a la presa de Susqueda. No es considerado un punto negro, pero sí que los que la frecuentan saben que se debe pasar muy despacio. Según algunos testigos, la familia iba a menudo a pasear por esta zona cercana al santuario de la Mare de Déu del Coll.

A consecuencia del accidente, pereció una niña de 1 año, su madre de 31 y embarazada de 6 meses y la abuela de las niñas de 52 años. También iban en el coche otras tres niñas de 3, 8 y 10 años. Ninguna llevaba Sistema de Retención Infantil (SRI) y además la pequeña de tres años iba sentada encima de su hermana de ocho. El Opel Vectra en el que viajaban los siete miembros de la familia solo tenía capacidad para cinco plazas, y ninguna pasajera llevaba el cinturón ajustado, según Interior. 

Desde el Servei Català del Trànsit se ha informado que, tanto no llevar SRI como la ocupación excesiva del vehículo están tipificadas como infracciones graves y suponen una multa de 200 euros cada una de ellas y, además, la primera implica la retirada de tres puntos del permiso de conducir.

El padre, de 33 años, que tuvo que ser atendido porqué estaba en estado shock, fue quien tras precipitarse consiguió subir hasta la carretera para llamar al 112. Los efectivos del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) trasladaron a las tres niñas con vida y al padre al Hospital Trueta de Girona. El hombre fue dado de alta durante la madrugada, la pequeña de 3 años permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) en estado grave y pronóstico reservado y sus dos hermanas están ingresadas en planta en estado menos grave.

 Este mediodía se ha hecho un minuto de silencio en recuerdo a las víctimas frente al consistorio de Salt, de donde era vecina la familia. La abuela era de La Pobla de Mafumet.