PSOE y PSC empiezan a negociar la nueva relación

Con las aguas más calmadas un mes después de la ruptura de la disciplina de voto del PSC en la investidura de Mariano Rajoy, el PSOE y los socialistas catalanes empiezan a negociar si dejan como está su relación orgánica o la modifican. La comisión mixta que nombraron ambos partidos se reunirá este viernes en la calle de Ferraz de Madrid, en lo que será la primera para toma de contacto. Ambas formaciones prometen actuar sin prisa, pero sin pausa, conscientes de que ha de aclararse pronto cómo seguirán relacionándose.

En el PSOE existe el decidido compromiso de que la indisciplina de los siete diputados del PSC en el Congreso no puede quedar impune y que es necesario revisar lo que llaman “anomalía orgánica” favorable a los socialistas catalanes. Hasta ahora, el partido que lidera Miquel Iceta estaba representado en todos los órganos del PSOE (congreso federal, comité federal, ejecutiva y dirección de grupo parlamentario), pero este partido no tenía ninguna representación en el PSC.

Los socialistas catalanes, por el contrario, suscriben aquello de “virgencita, que me quede como estoy”, aunque son conscientes de que algún precio habrán de pagar por la ruptura de la disciplina de voto y no haber secundado la abstención para que Rajoy siga en La Moncloa. 

Ambos partidos descartan que se pueda producir una ruptura orgánica, pero la intensidad de la sanción determinará también la actuación del PSC en el Congreso. Fuentes de este partido explican que un castigo severo no haría otra cosa que legitimar de nuevo a sus diputados para volver a marcar distancias, especialmente a la vista del acercamiento que el PP y el PSOE están visualizando en el Congreso con diversos acuerdos que hacen presagiar un apoyo a los Presupuestos para 2017 y a los recortes que comportarán.

Por parte del PSOE acudirán a la reunión la eurodiputada Elena Valenciano; Mario Jiménez, número dos de la gestora, y el veterano dirigente extremeño Francisco Fuentes. Representan la línea más dura del partido a favor de la sanción al PSC, que estará representado por Salvador Illa, secretario de organización; la diputada Meritxell Batet y el alcalde de Cornellà, Antonio Balmón, todos ellos miembros de la ejecutiva y de la máxima confianza de Iceta, especialmente los dos primeros.

Miquel Iceta pactó con el presidente de la gestora del PSOE, Javier Fernández, concederse un plazo de dos meses para revisar la relación, pero se da por hecho que ese límite, que expira después de fiestas, podría prorrogarse para facilitar el pacto.