Puigdemont sube la presión a la CUP: “Sin Presupuestos no hay referéndum”

Superados los debates de la cuestión de confianza y de Política General, la siguiente pantalla del Gobierno catalán se sitúa en los Presupuestos. Y el Gobierno busca otra vez, como lo hiciera en junio pasado con las Cuentas de 2016, pasarle toda la presión a la CUP. Por ello el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha apelado hoy a los anticapitalistas, y también a Catalunya Sí que es Pot, a que los apoyen para que no se viva la misma situación que en junio, cuando el veto de todos los partidos excepto el de Junts pel Sí, dejaron la legislatura al filo de su final. Puigdemont mantiene que ese sigue siendo un riesgo y por ello ha respondido a la portavoz de la CUP, Anna Gabriel, que "no habrá referéndum si no hay Presupuesto" justo 36 horas después de que los anticapitalistas admitieran que la convocatoria de la consulta es el gran logro del Gobierno catalán en lo que va de mandato.

El presidente catalán ha afrontado la sesión de control en el Parlament asegurando que los miembros de su Ejecutivo serán "fieles y leales" a las resoluciones aprobadas en la cámara hace dos semanas, en las que se fija para septiembre de 2017 la consulta y, en caso de la victoria del sí, la convocatoria seis meses después de unas elecciones constituyentes.

Pero Puigdemont también ha asegurado que una de las resoluciones, la aprobada junto a Catalunya Sí que es Pot, mandata que ese referéndum "pueda ser lo más acordada posible", ha dicho, después de que Gabriel le demandara que tanto el Ejecutivo como los partidos que lo conforman "no se muevan ni un milímetro" de las resoluciones independentistas acordadas en el debate de Política General. "Somos los del diálogo y el pacto. No renunciaremos", ha señalado el presidente de la Generalitat, en una clara referencia a su intención de buscar consensos sobre la consulta con el Ejecutivo central pese a "un Estado que no da señales de querer hablar".

Pese al aviso de que la aprobación de los Presupuestos condicionará el referéndum y la continuidad de la legislatura, Puigdemont se ha negado a dar pistas sobre cuál será la política fiscal. Lluís Rabell, presidente del grupo de Catalunya Sí que es Pot, el único partido junto a la CUP que se ha abierto a hablar sobre las cuentas del próximo año con el Ejecutivo, ha demandado "un giro en materia tributaria" para conseguir recursos que permitan introducir la renta garantizada de ciudadanía. Se refería a un incremento del impuesto de la renta a los más ricos y de la recuperación del impuesto de Sucesiones y Donaciones.

El presidente de la Generalitat se ha negado a dar pistas sobre cambios tributarios. Y, para evitar entrar en ese campo, ha preferido responder a Rabell que su confluencia lo que quiere es "un giro social y no un giro tributario" que, en su opinión, requiere de la aprobación de unas nuevas Cuentas para el próximo año. Sobre los cambios tributarios, Puigdemont solo ha respondido que "no pongamos parches, tenemos un gravísimo problema de financiación", su forma de responder que el problema de recursos de Cataluña no se solventa elevando la presión fiscal modificando impuestos cedidos sino acabando el déficit fiscal con el Gobierno.