La esencia de Outumuro, en 80 miradas barcelonesas

Los retratos de Manuel Outumuro resaltan en la pared como si tuviesen vida propia. Instalados en el Palau Robert de Barcelona, el fotógrafo exhibe 80 trabajos -de una selección de más de 500- que realizó por encargo para distintas revistas y periódicos. En Outumuro BCN retrats,que permanecerá hasta el 26 de febrero de 2017, captura la mejor cara de figuras destacadas de la ciudad, desde escritores como Eduardo Mendoza, científicos como Eduard Punset y actores como Quim Gutiérrez.

“Hay poco retratos en movimiento, pero todos tienen su intención”, indica Outumuro. La fuerza de las imágenes, especialmente aquellas ampliadas, contrasta con la naturalidad que transmiten sus protagonistas. Según el fotógrafo: “Soy partidario de que se sientan cómodos, nunca agredidos por el hecho de disparar la cámara”. Su método consiste en hacer lo posible para “crear un ambiente de bienestar para que sean más generosos con su tiempo”.

Con el resultado obtiene fotografías como la del deportista Pau Gasol, que se abraza a una pelota de baloncesto, o la del futbolista Xavi Hernández, con un balón clavado en su cabeza. “Cada personaje está más cómodo en su terreno”, remarca Outumuro, que ha inmortalizado a otros fotógrafos como Leopoldo Pomés o Colita. Dada su trayectoria como director artístico y diseñador, su estilo se encuentra a caballo entre el retrato y la moda. “Es más fácil hacer una foto a una modelo que a un actor porque están más acostumbrados a interpretar”, señala.

En la colección destaca el impactante retrato de Quim Gutiérrez representado como el cuadro de Velázquez, El Dios Marte, realizada para este periódico. Outumuro explica que “gran parte de las fotografías expuestas eran para EL PAÍS, con el que llevo colaborando desde hace 25 años”. Otros retratos incluyen el de Elías mientras interpretaba a Diana Vreeland en la obra de teatro Al Galope, así como los del modelo Andrés Velancoso y el actor Eduard Fernández.

“Hay algunos personajes que ya dan la fotografía, como los componentes de Tricicle que salen tapándose un ojo, pero hay otros a los que hay que sacársela”, puntualiza el fotógrafo, que apela al “diálogo visual que se potencia con la complicidad y la sinceridad”. Es el caso de escritores como Enrique Vila-Matas o Rosa Regàs. “Yo no tengo un momento robado, lo mío dura una hora o más porque no hago selfies, sino retratos”, comenta. Algunos de ellos están intrínsecamente relacionados con la pintura, una de sus mayores influencias. Como muestra uno de los retratos, Outumuro recrea a Ferran Adrià como Picasso: “En mi imaginación, el pintor sería como él”.