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El negocio del hachís resurge entre los narcos gallegos

La policía detiene a nueve arousanos implicados en el transporte de un alijo de ocho toneladas de resina de hachís intervenidas en el Mediterráneo

Al menos doce detenidos, nueve de ellos en Galicia, es el balance provisional de una operación policial todavía abierta y desplegada tras la aprehensión en el Mediterráneo de un alijo de ocho toneladas de resina de hachís localizado la pasada semana a bordo de un velero procedente de las costas africanas cuando navegaba en aguas de Cartagena (Murcia).

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La organización que supuestamente preparó el envío de la droga desde Marruecos contaba con uno de sus principales núcleos de financiación y distribución en la provincia de Pontevedra. Se trata de viejos intermediarios y lancheros que operaban en el tráfico de cocaína -debilitado últimamente por la pérdida de infraestructura marítima y la presión policial- y que están apostando por el potente mercado del hachís en el sur. De hecho, en Vilagarcía fueron detenidos los cinco presuntos cómplices de la banda que tenía ramificaciones en Madrid, Almería y Albacete.

Uno de los arrestados y al que la policía le atribuye mayor peso dentro de la organización es David González Chorén, gerente del pub Don Piano de Vilagarcía. También fue detenido un vecino de Catoira, Manuel Fontenla, que se dedicaba a la venta de productos agrícolas, además de un hombre y una mujer, ambos hermanos y de nacionalidad colombiana que residían en Vilagarcía.

Las pesquisas están siendo coordinadas por un juzgado de Sabadell y se están desarrollando conjuntamente por dos unidades antidroga, los Greco de la Policía Nacional y la Edoa de la Guardia Civil que investigaban de forma independiente los movimientos de la red considerada una de las más importantes en el tráfico de hachís y que ya se da por desarticulada.

La participación de la rama gallega se descubrió tras la aprehensión del yate Mar Blue por una dotación del Servicio de Vigilancia Aduanara que localizó los fardos a bordo, apilados en los camarotes, y tripulado por cuatro gallegos, todos ellos vecinos de O Salnés. Tras el abordaje y la declaración de los marineros se produjeron las detenciones en cadena. Paralelamente, el juzgado de instrucción de Sabadell ha abierto una investigación patrimonial de los detenidos y en el mismo operativo se han intervenido varios vehículos, embarcaciones que utilizaba la organización, dispositivos electrónicos y ordenadores, además de dinero en efectivo.

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Los investigadores consideran que la organización había logrado introducir varios alijos utilizando la misma infraestructura que emplearon con este último transporte interceptado a bordo del Mar Blue. Algunos de los detenidos tienen antecedentes por narcotráfico y cuentan con experiencia en el transporte y distribución de cargamentos. Formaban parte de otras redes gallegas de cocaína desmanteladas en los últimos años.

La droga incautada habría generado unos beneficios de al menos 12,6 millones de euros a la organización tras su distribución en el mercado negro, La rama gallega que supuestamente financió el envío, habría pagado el valor del cargamento a las mafias marroquies que controlan la producción y salida de los cargamentos a Europa desde las costas africanas.

Esta previsto que los detenidos en Galicia que permanecen en dependencias policiales de Pontevedra pasen a disposición judicial este viernes y declaren por videoconferencia o a través de comisión rogatoria desde un juzgado de Vilagarcía bajo la supervisión del de Sabadell desde donde se dirigen las investigaciones, aunque la instrucción probablemente se derive a la Audiencia Nacional, según las fuentes judiciales consultadas.

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