Un comerciante chino muere de un corte en el cuello en su tienda de Ciudad Lineal

El hijo del fallecido se acercó al negocio, situado en el número 3 de la calle del Río Ulla (Ciudad Lineal), semiesquina al número 368 de la calle de Alcalá, al ver que su padre se retrasaba y que no contestaba a sus llamadas telefónicas. Tenía el cierre del negocio medio echado y las luces encendidas. Cuando entró, vio a su progenitor tirado en el suelo, por lo que llamó de inmediato a los servicios de emergencia y a la policía.

Los primeros en llegar fueron los agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la comisaría del distrito que ya apuntaron por emisora que la víctima podría estar muerta. Los facultativos de una UVI móvil del Samur comprobaron que el comerciante presentaba al menos una herida muy profunda por arma blanca a la altura del cuello. Sin manipular el cuerpo, tomaron las constantes vitales y vieron que llevaba un tiempo ya sin vida, por lo que solo pudieron confirmar el fallecimiento. Este se pudo producir por desangramiento, debido al enorme charco que había alrededor de la víctima.

Fuentes de la investigación han destacado que resulta difícil saber con exactitud cuándo se produjo la muerte ya que en la tienda hacía mucho calor. El cuerpo fue trasladado de madrugada al Instituto Anatómico Forense, en la Ciudad Universitaria, después de que el juez de guardia ordenara su levantamiento. Está previsto que hoy se le practique la autopsia.

La zona fue acordonada de inmediato por la policía. Los agentes de Homicidios se han hecho cargo de las investigaciones, en las que también participan especialistas de Policía Científica. Esta madrugada han estado recogiendo pruebas y vestigios para poder detener al autor del asesinato.

Los agentes del distrito y de la Brigada de Seguridad Ciudadana patrullaron por los alrededores en busca de posibles sospechosos, pero no hallaron a nadie. Los investigadores están comprobando si el local tenía sistema de videovigilancia y había grabado lo sucedido. También están viendo locales por las proximidades que tengan este sistema de seguridad para recabar las imágenes.

Las primeras investigaciones apuntan a que Y. Y. pudo ser víctima de un atraco y que se resistió para que no se le llevaran la recaudación del día. Un hecho similar ocurrió el 2 de febrero de 2014 en el distrito de Moratalaz, cuando una comerciante china de 29 años murió en un asalto a su tienda tras recibir un disparo en la cabeza. El supuesto autor, Israel R. R., de 37 años, fue detenido a los pocos minutos en las inmediaciones. Se había llevado la caja registradora.

El pasado 10 de febrero, una dependienta china resultó herida ayer por la noche durante el atraco al establecimiento en Aluche tras recibir un disparo en el pecho. El atraco se produjo a las 23.15 en un establecimiento situado en el número 77 de la calle de Escalona, cuando accedió al comercio al menos una persona que intentó hacerse con toda la recaudación del local. Supuestamente, se inició un forcejeo y el atracador disparó a una de las dependientas.