BBVA modera al 2,9% el crecimiento de la región en 2016 por la incertidumbre política

La economía madrileña sigue dando el estirón a pesar de que el fantasma de la crisis aún levita sobre ella. El servicio de estudios del BBVA prevé que el PIB de la región crezca un 2,9% en 2016, una cifra que ha moderado hasta en tres décimas por el deterioro que sufre, desde el pasado enero, la certidumbre política en España. No obstante, si la economía regional sigue creciendo al ritmo actual (0,7% en el primer semestre del año), la entidad ha asegurado que deberá corregir al alza sus previsiones para este año, que podrían llegar hasta el 3,6%. Para 2017, BBVA acelera ligeramente el crecimiento y lo sitúa en un 3%, lo que daría lugar a la creación de más de 150.000 empleos en este bienio. En ese caso, la tasa de paro de la Comunidad de Madrid se reduciría hasta el 14,5% (actualmente es del 16,8%). En 2015, el PIB de la región creció un 3,4%, cinco décimas por encima de su media histórica.

La previsión para los próximos dos años se apoya en los efectos positivos de factores externos e internos. Entre los primeros destacan la caída del precio del petróleo, unas perspectivas más favorables para la economía china, la percepción de que EE UU no aumentará sus tipos de interés y la estabilidad de las potencias emergentes, que no han vuelto a caer en recesión. Entre los internos, predomina la recuperación de la demanda interior (por el incremento del consumo de las familias), el dinamismo de las exportaciones y la incidencia "fundamental" del turismo en la economía regional. Así lo ha explicado este miércoles Rafael Doménech, economista jefe de Economías Desarrolladas de BBVA, durante una rueda de prensa en la que estuvo acompañado por Juan Carlos Hidalgo, director Territorial de BBVA Centro.

La entidad ha presentado, además, el informe económico del primer semestre de 2016, que indica que la Comunidad ha encadenado ocho trimestres consecutivos de crecimiento. Pero no solo mejoran los datos macroeconómicos, también lo hace el empleo (según la última encuesta de población activa, la de mayo, en Madrid hay 12.637 parados menos que el mes anterior). La productividad, sin embargo, continúa siendo uno de los retos principales. Para Doménech, que la región crezca alrededor del 3%, tres décimas por encima de lo que se espera para el resto de España, sitúa a Madrid a la cabeza de la recuperación económica, por lo que esta Comunidad "sería una de las primeras regiones españolas en recuperar el nivel de empleo anterior a la crisis económica". El experto destaca que, a final de 2017, la región estará solo a cuatro puntos porcentuales del empleo que existía antes de la crisis.

"Deterioro de la credibilidad"

BBVA advierte de que a pesar de que la economía madrileña continúa creciendo a un ritmo saludable, existen algunos riesgos que podrían hacer cambiar la tendencia. Doménech se ha referido especialmente al desequilibrio de las cuentas públicas al final de 2015, que puede suponer "un deterioro de la credibilidad", aunque ha incidido en que las cuentas de la Comunidad de Madrid se encuentran en una buena posición para alcanzar el objetivo de déficit de este año, situado en el 0,7%. También persiste, ha subrayado, la incertidumbre sobre la política económica que se implementará en los próximos años en España. "Tener certeza sobre factores como la regulación o la política impositiva es imprescindible para que familias y empresas puedan llevar a cabo sus decisiones de gasto".

Al inicio de la presentación, el economista ha destacado que "las dudas de que la economía global entrara en una nueva recesión se han despejado" y que "ha seguido creciendo alrededor de un 3%". No obstante, el crecimiento es menor al registrado antes de la crisis, cuando era del 4%, lo que hace a la economía "más vulnerable a los riesgos". Para evitarlos, Doménech ha señalado que hay que seguir impulsando reformas ambiciosas "que creen más empleo y trabajo de calidad", aunque no ha concretado cuáles serían esas reformas que debe llevar a cabo Madrid para "liderar ese crecimiento y converger con las regiones europeas más avanzadas". Preguntado sobre la incertidumbre que puede causar el estancamiento de las operaciones urbanísticas en Madrid, Doménech ha evitado entrar en valoraciones particulares, aunque ha asegurado que "todas las decisiones económicas cuentan".