Carmena pide que los okupas dejen los centros sociales cuando lo exija la propiedad
El concejal Guillermo Zapata ha dicho al juez que se desvinculó del Patio Maravillas cuando iban a desalojarlo
La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha dicho hoy que los colectivos que ocupan edificios para desarrollar actividades culturales deberían marcharse cuando los propietarios lo reclaman.
La alcaldesa ha hecho esta reflexión a resultas del juicio celebrado hoy contra su concejal Guillermo Zapata por un presunto delito de usurpación en la ocupación de un edificio de la calle del Pez que durante años albergó las actividades del colectivo Patio Maravillas.
"Lo suyo es que, cuando los propietarios reivindican la propiedad, las personas que han generado esa actividad cultural en esos centros se marchen y dejen la propiedad", ha reflexionado la alcaldesa sobre ese "fenómeno general" -presente en otras ciudades como París o Berlín, ha dicho- de fundar centros culturales en edificios "sin rentabilizar".
La alcaldesa ha reconocido que la ocupación supone una "invasión" de la propiedad privada, pero considera que "la utilización de edificios en desuso no es una ocupación como tal", por lo que a su juicio puede estar en un marco de "tolerancia" si "no hay un interés de tener una posesión activa".
Por su parte, el concejal madrileño Guillermo Zapata ha dicho hoy en el juicio por ocupar el inmueble conocido como Patio Maravillas que se desvinculó de este lugar cuando les comunicaron que les iban a desalojar en febrero de 2015, pero ha negado conocer otros dos requerimientos de desalojo anteriores de la propietaria.
"Cuando el abogado nos indica la orden de desalojo (febrero de 2015) dejo de participar", ha asegurado Zapata en la vista oral que se celebra en el Juzgado de lo Penal número 14 de Madrid contra él y tres activistas del colectivo Patio Maravillas, acusados de un delito de usurpación de inmueble, por el que se enfrentan a una pena de 1.800 euros de multa cada uno.
Ahora bien, ha negado tener conocimiento de las otros dos peticiones por vía notarial de la empresa propietaria: la primera vez en febrero de 2014 cuando se les dio un plazo de 10 días y luego el 15 de septiembre del mismo año cuando tuvieron un mes.
Fue ya en el tercer requerimiento, que se produjo el 19 de febrero de 2015, por vía judicial, cuando Zapata ha dicho que fue alertado por su abogado del mismo y, por lo tanto, optó por dejar de participar en las actividades que allí se realizaban.
Zapata ha explicado que su función allí era organizar "talleres de guion" y ha negado ser miembro la "Asamblea del espacio polivalente autogestionado Patio Maravillas", aunque luego ha reconocido su firma en un documento de la asamblea entregado al juzgado.
Tras la denuncia en septiembre de 2014 de la propietaria, Zapata ha admitido que se personó en la causa porque "quería explicar delante de un juez qué tipo de actividades se hacían en el Patio Maravillas". "Considerábamos que hacíamos una defensa política del espacio", ha añadido.
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