El 87% de alumnos de instituto secunda el paro, según los convocantes

El Sindicat d'Estudiants del País Valencià ha estimado en un 87% la participación de los alumnos de los institutos de la Comunidad Valenciana en la primera jornada de huelga estudiantil contra la Lomce y el decreto del 3+2, convocada para los días 13 y 14 de abril. Isabel Aguilar, coordinadora del sindicato, considera un "exito" la convocatoria que, según sus estimaciones, ronda el 40% en la Universitat de València.

La portavoz del Sindicat ha declarado, en su comparecencia a las puertas de la Facultad de Psicología de Valencia, que la organización ha recibido "denuncias de estudiantes por intentos de vetar el derecho a huelga en institutos y la Universitat de València".

Concretamente, Aguilar ha mencionado que desde el Rectorado de la Universitat de València se ha enviado un mensaje interno a los decanatos de las facultades dando el consejo de que no se aplique el procedimiento habitual por no ser una huelga legal.

La coordinadora del sindicato también ha denunciado que tras una reunión con el vicerrector de Estudiantes de la Universitat de València, Jordi Caparrós, a raíz de este mensaje, este les comunicó que "no sabía nada y se lavó las manos" y ha recordado que el trabajo del vicerrector es "garantizar los derechos de huelga y manifestación de los estudiantes".

El el sindicato ha pedido la dimisión del rector de la Universitat de València, Esteban Morcillo, y de Caparrós, y ha afirmado que cualquiera que esté "vetando el derecho a huelga está de acuerdo con la Lomce y el 3+2, algo que los estudiantes no van a permitir".

A este respecto, Jordi Caparrós ha asegurado que ante la denuncia que le hicieron llegar los estudiantes, preguntó al Rectorado, desde donde le aseguraron que no se había enviado ningún mensaje a nivel interno.

Aguilar ha querido destacar el desacuerdo del Sindicat d'Estudiants con la actuación de los partidos y ha denunciado que ni el gobierno en funciones del PP ni el pacto PSOE-Ciudadanos "van a hacer nada por mejorar la situación de la educación pública".

El Sindicat d'Estudiants "avisa al gobierno que entra" que los estudiantes no van dejar que "las más de 20 huelgas convocadas en los últimos cuatro años caigan en papel mojado".

Así, exigen a el nuevo gobierno, "sea de derechas o de izquierdas", la derogación de la Lomce, una ley "completamente corrupta que pretende echar de la universidad a los hijos de los obreros". y la paralización del 3+2, que se pretende implantar en septiembre.

El Sindicat d'Estudiants también reclama al nuevo gobierno la readmisión de los profesores despedidos en los últimos años, el aumento de las becas y la reducción inmediata de las tasas universitarias.