Sexualidad, África, Ramon Llull y el tiempo, en el CCCB
La Premio Nobel Svetlana Alexiévich visitará el centro en mayo
"Desde la convicción de que las ideas mueven el mundo, que tienen capacidad transformadora sobre la sociedad, la política, la economía y las actitudes individuales y colectivas... el CCCB asume la complejidad, la intensidad y la creatividad de un momento histórico en el que las antiguas certezas se diluyen y los nuevos paradigmas requieren imaginación y generosidad", aseguró Vicenç Villatoro durante la presentación de la próxima temporada del Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB) en su segundo año de mandato. "Una programación abierta para dar respuesta a las preguntas que se vayan planteando”, explicó.
10 millones y 380.000 visitantes
Toda esta actividad cuenta con una previsión de presupuesto de 10 millones de euros; una cifra por encima de los 9,2 de 2014 en un año con un balance de 380.000 visitantes físicos: "Nos sitúan en la banda alta de la historia del centro, pero no batimos ningún récord, ya que son algunos menos que el pasado año; pero nos parece, internamente, una buena cifra", destacó Villatoro ayer, que sumó a esta cifra los 159.000 visitantes de Big Bang Data en Madrid y Londres, o la dedicada a Roberto Bolaño.
Villatoro también destacó que las dos instituciones que forman el consorcio del CCCB, el Ayuntamiento de Barcelona y la Diputación le hayan renovado su contrato de un año por dos más.
El año que comienza estará marcado por el interés por "los espacios individuales e íntimos y la vida cotidiana, considerando que las grandes transformaciones del siglo XXI no se producen tanto en el espacio público como en los cambios de costumbres, relacionados con el día a día”, según Villatoro. Uno de los temas estrellas es África y su diseño contemporáneo que se analizará a partir de una gran exposición Making Africa que puede verse ahora en el Vitra Design Museum y que reúne los trabajos de 120 artistas del continente que demuestran como el diseño acompaña e impulsa los cambios económicos y políticos del continente. La exposición sorprenderá con afirmaciones como que en el continente hay más de 650 millones de móviles registrados y mostrará el arte de una nueva generación de emprendedores y pensadores del continente, cuya imagen está más vinculada con temas sociales y dramas humanitarios.
El sexo tomará el CCCB a partir de octubre con la exposición 1.000 m2 de deseo, en el que se analizarán los espacios arquitectónicos de la sexualidad desde el siglo XVIII. “Será una exposición radical sobre el sexo en la cultura occidental”, explicó Rosa Ferré, una de las comisarias de la muestra y la jefa de exposiciones del CCCB. La exposición de tesis, centra su atención en cómo actúan estos espacios para conformar, tipificar roles y prácticas y pone de manifiesto la importancia de la arquitectura como resorte que activa el motor del deseo, analizando las utopías sexuales de Ledoux, Fourier y Sade.
Ramon Llull, en su 700 aniversario, protagonizará la exposición La máquina de pensar. Ramon Lull. Del Ars Magna al arte computacional, que analizará el personaje desde el punto de vista de su relación con el net work actual, abordando su sistema científico y su discurso intercultural, “una cuestión de máxima actualidad de un intelectual reivindicado por pensadores y artistas en la actualidad”, según el director del CCCB.
El centro barcelonés es sinónimo de literatura, este año no se celebra Kosmópolis una de las citas punteras, pero contará con momentos cumbres como la visita de la Premio Nobel Svetlana Alexiévich en mayo para explicar su trayectoria literaria y cómo ha ido retratando la realidad de la antigua Unión Soviética. Más literatura, como siempre, en encuentros como Primera Persona, el Hipnotik Festival o el Poetry Slam Barcelona.
Literatura y debates. En el CCCB se hablará del reto que supone el cambio climático para el futuro del nuestro planeta; de espacios públicos, de cómo el cabello identifica y personaliza a individuos y grupos; de turismo con todos los protagonistas implicados; y de cómo el hombre considera que en esta sociedad actual controla el tiempo, guardando el pasado, fijando el presente y administrando el futuro, todo con ayuda de la tecnología, pero a qué precio, se preguntan desde el CCCB; la aceleración de la sociedad. El tiempo será objeto de Debate Barcelona con algunos de los pensadores más destacados del momento como Hartmut Rosa o Marina Garcés.
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