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El Espanyol vuelve a los orígenes

El técnico blanquiazul, Sergio González, busca recuperar la solidez defensiva de su equipo, que ha encajado 16 goles en las primeras siete jornadas

Juan I. Irigoyen

Cuando Sergio González se hizo cargo del Espanyol en el verano de 2014 prometió vestir Cornellà-El Prat con un juego alegre. “Tiempo para cambiar y hacer un fútbol más sencillo siempre tenemos”, advertía el técnico antes del inicio de temporada. Resulta que la simpatía por salir con el balón jugado desde atrás y la intención de hacer circular el cuero le duraron 10 jornadas. El Espanyol no encontró resultados y tras una reunión con los capitanes, Sergio pegó un volantazo y apostó por un juego más tímido en ataque, aunque aguerrido en defensa. La estrategia no le salió mal: el cuadro blanquiazul finalizó décimo en la Liga y alcanzó las semifinales de la Copa del Rey.

Este verano, Sergio recuperó su vieja idea de buscar un equipo con salida de balón y juego asociativo. Pero, otra vez, los malos resultados le han hecho cambiar de planes (suman nueve puntos y 16 goles encajados tras los primeros siete partidos). “La consigna es no generar debilidades atrás”, explicó Sergio González. “¿Cómo lo conseguimos?”, añadió; “los laterales no deben jugar tan adelantados ni los centrales tan abiertos. No nos tenemos que complicar la vida en nuestro campo”. “Como estábamos sufriendo mucho en defensa, Sergio nos pidió que volvamos a los orígenes”, completan desde el vestuario. Los orígenes no son otra cosa que primero intentar sellar la portería y luego que Caicedo y Asensio se las arreglen como puedan en ataque, al igual que en el curso anterior Sergio García, Stuani y el propio Caicedo se buscaban las habichuelas.

No nos tenemos que complicar la vida en nuestro campo” Sergio González, entrenador del Espanyol

El dilema para Sergio es que sus mediocampistas y delanteros le piden adelantar la presión, mientras que sus defensas le sugieren esperar en campo propio. “Como nos cuesta generar juego, a nosotros se nos da bien recuperar balones en campo contrario. En cambio, si esperamos cerca de Pau cuando robamos un balón, estamos muy lejos de la portería rival”, explica unos de los volantes blanquiazules. “A los delanteros no nos está llegando un balón fácil”, suman desde el ataque del Espanyol. “Desde que se marchó Héctor Moreno (fue traspasado este verano al PSV holandés) nos cuesta jugar con la defensa adelantada”, completan desde la retaguardia.

“Tenemos que corregir lo que no estamos haciendo bien: sobre todo en la salida del balón y en las pérdidas en nuestro campo”, explicó Sergio González. El Espanyol visita al Betis (22.05 h. TVE) en su búsqueda de volver a los orígenes y recuperar la solidez defensiva. “Los rivales nos generan ocasiones más por desmérito nuestro que por mérito de ellos”, concluyó el técnico blanquiazul.

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Sobre la firma

Juan I. Irigoyen
Redactor especializado en el FC Barcelona y fútbol sudamericano. Ha desarrollado su carrera en EL PAÍS. Ha cubierto Mundial de fútbol, Copa América y Champions Femenina. Es licenciado en ADE, MBA en la Universidad Católica Argentina y Máster de Periodismo BCN-NY en la Universitat de Barcelona, en la que es profesor de Periodismo Deportivo.

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