Toda una dama

LoneLady se llama realmente Julie Anne Campbell y procede de Manchester. Debutó con un sencillo en 2007, pero su primer álbum, Nerve Up, no llegaría hasta 2010. Cinco años después, en marzo de 2015 ha editado el segundo, Hinterland. Ambos con el paraguas del sello Warp, una de esas marcas que parecen validar con su logo todo lo que tocan. Su discografía se completa con otros cuatro sencillos (los tres últimos, también con Warp).

Groove it out, primer sencillo de Hinterland, el disco que LoneLady presenta hoy en la Sala Sol.

Si en su primer álbum se sumó a ese pospunk moderno que se complacía en retorcerse sobre sí mismo y hacerlo todo difícil, su segundo disco es mucho más accesible. De hecho Groove It Out, la canción que sirve de mascarón de proa de Hinterland, es pop luminoso que parece tener un pie en los grupos de los años ochenta de su ciudad y el otro en el electropop neoyorquino de aquella década. Como si Madonna hubiera sido la vocalista de A Certain Ratio. Pero no es su único registro: a veces puede recordar a Kate Bush; otras es como si PJ Harvey hiciera versiones de Pylon.

Con menos suerte comercial que otras compañeras de generación, en sus directos se mueve entre lo bailable y lo hipnótico y viene en formato de cuarteto con ella a la voz y la guitarra, batería y dos multiinstrumentistas más que solventes. El jueves actuará en la Sala Sol, con los madrileños Gatos Negros como teloneros.