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El testigo que acusó a los Mossos por una muerte en Salou se retracta

Babakar ha admitido que no pudo ver lo ocurrido al estar en esos momentos inmovilizado

Khadima (i) y Babakar entran en los juzgados de Salou.
Khadima (i) y Babakar entran en los juzgados de Salou.J. L. sellart

La declaración ante el juez de los compañeros de piso de Mor Sylla, el senegalés fallecido durante una operación de los Mossos d’Esquadra en Salou contra el top manta, ha servido este lunes para despejar dudas sobre las acusaciones lanzadas en los últimos días contra los agentes de policía. Babakar, uno de los tres testigos de lo ocurrido y que había asegurado que había visto a Sylla forcejear con un mosso antes de caer al vacío, se ha retractado en sede judicial. Babakar ha admitido que no pudo ver lo ocurrido al estar en esos momentos inmovilizado.

Este lunes han comenzado las declaraciones para averiguar qué pasó en Salou la madrugada del día 11 de agosto. El juez que se encarga de la investigación ha comenzado a tomar declaración a los tres compañeros de piso y a su hermano, que fue quien puso la denuncia por sus dudas con la versión oficial. Los tres hombres que estaban en el apartamento a la hora que entraron los mossos aseguraron que no vieron nada. Thioube, Babakar y Khadim Gueye, dos de ellos asistidos por un intérprete, han asegurado ante Joaquín Elías, el juez decano de Tarragona, que, debido a la inmovilización por parte de los agentes que entraron a la vivienda, no pudieron ver qué pasó con su compatriota y cómo se precipitó al vacío. Elías ha asumido el caso para dar celeridad al proceso, según fuentes judiciales.

La declaración de Babakar se contradice con las informaciones dadas por él mismo a los medios de comunicación dos días después del accidente. Este lunes se ha retractado y ha vuelto a la versión que dio en la comisaría de los mossos el día del accidente tras ser detenido e imputado por un delito contra la propiedad industrial y pertenencia a grupo criminal.

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Los tres testigos entraron y salieron de los juzgados corriendo y no quisieron hacer declaraciones. Sólo uno de ellos, Ibrahim Sylla, el hermano de Mor Sylla y que no estaba en el lugar de los hechos, ha atendido a los medios. Ha asegurado que ante el juez ha explicado “lo justo y necesario”. Su abogado sí quiso dejar claro que sólo ha pedido “aclarar los hechos y no ir contra los mossos”.

Este miércoles está previsto que pasen por el juzgado nuevos testigos, también compañeros de piso de Sylla. Durante la semana lo harán también los tres testigos que aportan los mossos y que avalan la versión policial que asegura que no hubo contacto entre los agentes que entraron en el piso y Mor Sylla. No se hará público cuándo serán estas declaraciones ya que se ha aceptado que sean testigos protegidos. Tras la declaración de estas tres personas, dos que lo vieron y una que lo oyó, el juez decidirá si cita a declarar a los agentes de los mossos que participaron en el operativo.

De momento, los policías aún no han declarado de manera oficial. Cuando terminó el dispositivo, los agentes explicaron a sus superiores los hechos, pero no se ha abierto ninguna investigación interna ya que desde el cuerpo no se encontró ningún indicio de negligencia. El Departamento de Interior mantiene la versión de que no hubo contacto físico y que las declaraciones de los agentes se hicieron “sin ningún tipo de contradicción”.

9.000 en daños por los distrubios

El alcalde de Salou, el convergente Pere Granados, ha anunciado que el ayuntamiento se personará como acusación particular contra los causantes de los daños del pasado martes después de la muerte de Mor Sylla. El consistorio ha cuantificado en 9.000 euros los daños que se hicieron en mobiliario urbano durante los disturbios entre la policía y los compatriotas del hombre muerto. Granados ha asegurado que “no vamos a permitir que queden impunes estos hechos” y que “los actos violentos deben tener consecuencias y se debe hacer caer todo el peso de la ley; porque en una sociedad democrática no se puede tolerar ningún acto de esta virulencia” y “sin sentido”.

Es la primera vez que Granados se muestra firme en pedir la expulsión del país de aquellos senegaleses violentos que no tengan el permiso de residencia en regla; muchos de ellos empadronados en su ciudad pesar de no tener papeles. La Policía Local de Salou está colaborando en las diligencias de los Mossos para identificar los autores de los disturbios que ocasionaron los cuantiosos destrozos. Fuentes de los Mossos han explicado que las investigaciones siguen su curso y no se descartan detenciones en los próximos días. Sólo una persona fue detenida durante los incidentes.

Para los sindicatos de los Mossos, el operativo de Salou todavía trae cola. Diferentes organizaciones sindicales de la policía catalana han condenado la “contención” y “pasividad” que se pidió a los agentes durante el operativo. Aseguran que los mandos evitaron la detención de un hombre que agredió a un agente de la línea policial. Una “carta blanca”, aseguran desde los sindicatos, que puede terminar con graves incidentes con el colectivo de manteros. Una de estas organizaciones ha enviado una carta al Director General de la Policía, Albert Batlle, para pedir explicaciones sobre estas “nuevas” directrices con los vendedores del top manta.

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