Festival de Peralada: suma y sigue

Los 22 espectáculos de la edición de este año de uno de los clásicos del verano, el Festival Castell de Peralada, han atraído a 25.000 espectadores con una media de ocupación del 90% y 10 días con todas las entradas vendidas. Una alta aceptación del público por la oferta del festival que sigue por la vía de apostar por valores seguros y figuras de primera línea, como lo son las voces de los tenores Juan Diego Flórez y Klaus Florian Vogt, o la de la soprano Diana Damrau en el apartado de ópera, en el que este año el festival ha realizado una producción propia de la ópera Otello, de Verdi, con las voces de Gregory Kunde, Carlos Álvarez y Eva Maria Westbroekos.

Una ambiciosa producción propia —con dirección musical de Ricardo Frizza y de escena a cargo de Paco Azorín— que contó con una escenografía de kilómetro cero, puesto que los muros móviles y otros elementos fueron construidos en talleres del Alt Empordà y en el propio festival. Además de 250 profesionales implicados en el montaje. En el apartado de ópera contemporánea ha destacado el estreno de 4Carmen, una mirada especial de la creación de Bizet. Peralada se sumó a la celebración del centenario del estreno del El Amor Brujo, de Manuel de Falla, con un espectáculo, El Amor Brujo, el fuego y la palabra, de la particular visión de la Fura dels Baus del clásico de Falla.

Otra de las apuestas de 2015 ha sido la danza, encargada de la apertura del festival a cargo del reconocido Béjart Ballet Lausanne. Peralada ha sido el escenario de la despedida de una de las figuras destacadas de la danza, Sylvie Guillem, y del estreno de una particular Yo, Carmen, de la bailaora Maria Pagés.

Ópera y danza, con una programación cuidadosa, volverán a tener un peso muy importante en 2016, cuando el festival de Peralada cumplirá 30 años.

La misma apuesta por la calidad en la música contemporánea y pop que este año han protagonizado Tom Jones, Serrat, Earth Wind&Fire Experience, Luz Casal, Gregory Porter, entre otros, y las de los grupos The Sey Sisters, The Excitements y The Limboos que despidieron el festival en la noche del sábado a ritmo de soul y rythm'n blues. Una Black Night de broche final en la que el público acabó bailando.