Una huelga de los trabajadores atasca Port Aventura
La protesta causa una afectación irregular en las instalaciones y los servicios del parque
Una huelga convocada por el sindicato UGT ha colapsado los accesos a Port Aventura durante parte de la mañana. Los huelguistas exigen una moratoria en la aplicación de un controvertido convenio colectivo que se presenta como una carta blanca para la rebaja de salarios y la subcontratación. En el que es uno de los primeros días fuertes de la campaña estival en el parque, el paro se ha dejado notar sobretodo en los viales que dan entrada al recinto, donde los piquetes han bloqueado el paso de coches y autocares y han provocado largas colas.
A pesar de las molestias causadas a los visitantes, que solo podían entrar al recinto en cuentagotas, no se ha vivido ningún altercado más allá de algunas quejas puntuales de taxistas que se han visto atrapados en el colapso y las de algunos turistas disgustados por la espera que han tenido que soportar. Dentro de las instalaciones la huelga ha tenido una afectación irregular ya que Comisiones Obreras, que es el sindicato mayoritario en Port Aventura, no se ha adherido a la protesta. Josep Maria Álvarez, secretario general de la UGT en Cataluña, ha lamentado el posicionamiento de CCOO delante de lo que considera "no solamente una lucha por un convenio, sino una lucha por la dignidad". "La desunión no ayuda", ha abundado Álvarez.
La tensión entre sindicatos ha quedado latente en las últimas semanas. El convenio ha sido pactado por la dirección de la empresa junto con Comisiones Obreras pero UGT critica que no haya habido un referéndum para someterlo a la aprobación del personal del parque. Paco López, secretario de la UGT en Port Aventura, señala que "quien firmó el convenio lo hizo sin ser conocedor de la realidad ni de las necesidades de los trabajadores". En este sentido, relata que el nuevo convenio provoca "precariedad" porque supone la eliminación de los contratos fijos discontinuos y acaba con el plus de vinculación a la empresa, una especie de incentivo económico que premia la antigüedad.
En Port Aventura hay contratados alrededor de 5.000 trabajadores, entre empleados directos y subcontratados. El paro, manifiestan los convocantes, tendrá consecuencias desiguales dentro del recinto y donde puede tener más afectación es en el funcionamiento de las atracciones. Tiendas, hoteles y espectáculos se verán menos condicionados."Una parte del éxito de Port Aventura ha venido dado por el compromiso y la implicación de los trabajadores que atienden a los clientes", señalan fuentes sindicales. Subcontratando personal se rebajan los costes por trabajador de 1.000 euros mensuales de nómina a unos 670 euros. Los huelguistas apuntan que la precariedad es una embestida a la "profesionalización y al turismo de calidad".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.