El popular Reyes ofrece superávit y bajar el IBI para conservar Castelldefels

No hay propaganda con el alcalde despreciando a los inmigrantes (Badalona) ni una candidata (la de L’Hospitalet) con la cara cubierta con un nihab de forma provocadora. Con un 27% de inmigración de origen sudamericano muy integrada en el municipio, la receta de Xavier García Albiol no funciona en Castelldefels donde el alcalde popular Manuel Reyes aspira a revalidar la alcaldía que arrebató al PSC. Acechado por Ciutadans, el Partido Popular vive con el alma en vilo por su suerte en Barcelona pero confía en no levar el ancla por supuesto en Badalona ni tampoco en Castelldefels, su mejor botín en las elecciones de 2011.

Con un diario gratuito –propiedad de El club la Gaviota, de la que es vicepresidente- exhibiendo su obra de gobierno, Reyes ha tenido un mandato convulso. Con 8 ediles sobre 25 –la mayoría está en 13-, el PP gobernó con CiU hasta 2013 pero el soberanismo resquebrajó su idilio. Los convergentes acusan al alcalde de haberse mostrado como un alumno aventajado de Rajoy, tan capaz de presentar una moción a favor de la ley del aborto de Gallardón –que perdió en el Pleno- o de afirmar en televisión que los escolares no pueden hablar castellano en el patio. Con minoría, el PP se quedó al albur de la oposición: tuvo en 2014 que prorrogar las cuentas de 2013 y el resto de grupos le impuso las de 2015 además de haber aplicado casi 20 cambios en su gobierno.

Reyes se ofrece en esta campaña como alcalde de todos por encima de colores políticos y tiene como propuesta estrella una nueva rebaja del IBI y las obras de la tercera fase de la reforma del Paseo Marítimo. En su haber, ha logrado saldado la deuda y dejado las arcas con 12 millones de superávit.Reyes se enfrenta a una acusación similar a la que sufre Trias en Barcelona: que ha preferido cuadrar las cuentas antes que mitigar los efectos de la crisis entre quienes lo más necesitan. Según el Observatorio del Baix Llobregat, el paro solo se ha reducido 300 personas en cuatro años (4.238 en 2011 y 3934 en 2015). No lo ve así Alicia Sánchez-Camacho, líder del PP catalán, que sostiene: "Su balance es extraordinario. Ha pagado las deudas, se ha bajado el paro, ha pagado las facturas a proveedores, dinamizado el comercio local y luchado contra el incivismo".

Frente a él, opone resistencia la socialista María Miranda, que se estrena liderando la candidatura (siete ediles en 2011); el convergente Xavier Amate (cinco) y Movem Castelldefels, liderada por la ecosocialista Candela López, que agrupa a ICV-EUiA (tres regidores), Equo y Mes. López le acusa de desatender a 1.500 personas que no reciben ningún tipo de prestación social; de que 300 corren riesgo de desahucio y de incumplir las 140 promesas que hizo en 2011.

La lista Castelldefels si puede, Castelldefels si pot, impulsado por el Círculo de Podem en el municipio, concurre a las urnas pero la dirección del partido en Cataluña no le ha dado un apoyo explícito en esta campaña a diferencia de lo que ha hecho en otros municipios del Baix Llobregat como El Prat, Molins de Rei, Sant Joan Despí o Cornellà. Miembros de estas cuatro listas participaron con Podem en un acto de campaña en El Prat el pasado día 10. Marc Llao, miembro del consejo ciudadano de Podem, afirmó que no buscan un enfrentamiento con el Círculo de Castelldefels pero sostuvo que no es una candidatura con la que se sientan "representados" porque  no cumplió los requisitos de la dirección para concurrir el 24-M como agrupación de electores.