Fernández Díaz y Mas piden ceses por el conflicto del supuesto chivatazo
El ministro los reclama si el juez archiva el caso y el presidente dice que ya deberían haberse producido en la policía nacional
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, tildó este miércoles de "irresponsables" al presidente catalán, Artur Mas, y a su gobierno por azuzar las tensiones surgidas entre Mossos d'Esquadra y el Cuerpo Nacional de Nacional a raíz del caso del presunto chivatazo de dos agentes de este último cuerpo a yihadistas de que estaban siendo investigados . El ministro asegura tener "un magnífico concepto" de los Mossos d'Esquadra pero ha catalogado de "triste y lamentable que se les haya obligado a presentar por dos veces una misma denuncia".
Durante una visita a Reus en la que mostró su apoyo al alcaldable por el PP, Sebastià Domènech, el ministro desafió a Mas instándole a forzar dimisiones en la Generalitat si la Audiencia Nacional archiva, como ya hizo en primera instancia, la denuncia presentada por los Mossos d'Esquadra y en la que señalan a la Policía Nacional como responsable de las filtraciones que pusieron en alerta a dos presuntos yihadistas. "Que se aplique su propia medicina", ha indicado el responsable de Interior, en alusión a unas declaraciones de Artur Mas y donde señalaba que en cualquier otro país un escándalo policial semejante se hubiese saldado con "dimisiones en cadena".
Fernández Díaz ha mantenido el mismo discurso defendido horas antes en una visita a Castelldefels y ha sentenciado que desde Interior "se aceptará lo que diga la Audiencia Nacional". Sin embargo, ha evitado comprometerse a exigir responsabilidades entre los mandos policiales en el caso que el juez Santiago Pedraz opte esta vez por investigar el chivatazo.
A pesar de la tensión latente, Fernández Díaz no ve con malos ojos las intenciones del ejecutivo catalán de convocar próximamente la Junta de Seguridad, inédita des de 2009 y compuesta por cinco representantes de la Generalitat y por otros cinco del Gobierno central, pero ha recordado que las funciones de la Junta no son otras que coordinar las fuerzas de seguridad del Estado con la policia catalana. En este sentido ha alertado que "la Junta de Seguridad formaliza acuerdos, no escenifica desacuerdos".
Por último, el responsable de Interior ha negado que desde el ejecutivo se esté maniobrando y utilizando los contactos diplomáticos en el Vaticano para que la Santa Sede aparte del escaparate independentista a sor Lucía Caram y a la monja Teresa Forcades. "Quién lo diga, está mintiendo", asegura el ministro que, por otra parte, ha terciado que "muy bien no les deben ir las cosas a los que recurren a monjas para hacer política. No parece propio del siglo XXI".
La visita de Jorge Fernández Díaz al barrio Pau Casals de Reus, una zona con alta densidad de población inmigrante, ha tenido que ser acortada y ha quedado suspendido el paseo que tenía previsto dar para departir con los vecinos. La causa ha sido la aparición de medio centenar de manifestantes que han proferido gritos y cantado proclamas mientras el ministro atendía a la prensa. El candidato por el PP a la alcaldía de Reus también ha sido abucheado y ha tenido que abandonar el barrio custodiado por los Mossos d'Esquadra.
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