Imputada por supuestas injurias la presidenta de los médicos de Valencia

La presidenta del Colegio de Médicos de Valencia, Mercedes Hurtado, ha sido citada a declarar como imputada por un supuesto delito de injurias contra su predecesora en el cargo, Rosa María Fuster. La titular del juzgado de Instrucción número 17 de Valencia ha admitido la querella, en la que se atribuye a Hurtado el envío de una serie de correos electrónicos que contenían "expresiones de naturaleza deshonrosa" y que fueron remitidos a numerosas personas poco antes de las elecciones internas en las que la querellada se impuso a Fuster.

Un portavoz del Colegio de Médicos ha declinado este martes valorar la situación en la que se encuentra su dirigente al considerar que se trata de una cuestión "privada", dado que los hechos que se le atribuyen habrían tenido lugar antes de que accediera al cargo, cuando todavía era candidata. El portavoz ha agregado, sin embargo, que Hurtado mantiene que ella no envió ni ordenó enviar los correos electrónicos y que, además, los mismos no contienen injurias.

La expresidenta del colegio y otras ocho personas se querellaron contra Hurtado también por un supuesto delito de calumnias. La juez rechaza, sin embargo, imputar tal delito a la dirigente de la corporación profesional. En los correos "se evidencia la disconformidad con la actuación de los miembros de la junta de gobierno", "pero sin que en ningún momento" pueda considerarse que se atribuye "una imputación precisa, concreta y determinada de un delito", por lo que queda excluido "el tipo penal de la calumnia tipificado en el artículo 205 el Código Penal".

Antes de admitir a trámite la querella, la juez ha practicado diversas diligencias de investigación

Antes de admitir a trámite la querella, la magistrada tomó declaración a los querellantes y practicó "distintas pruebas documentales" y "requerimientos" al colegio profesional, el Banco Santander y la Agencia Tributaria. A la luz de las diligencias sí considera que los mensajes, que fueron enviados a muchos de los potenciales votantes en las elecciones del Colegio de Médicos, supusieron "un ataque al honor, fama y crédito" de los mencionados en ellos. Algunos de ellos eran miembros de la junta de gobierno de la institución y "se presentaban al sufragio electoral convocado".

Los correos incluyeron, según la juez, "expresiones afrentosas para los querellantes, que se han sentido menospreciados y desprestigiados en sus distintas esferas, profesional, personal y social, con el consiguiente prejuicio para su crédito, dignidad y prestigio". Por ello cita a declarar a Hurtado el 29 de mayo.