El Supremo ratifica la ordenanza que prohíbe ir desnudo por Barcelona
El Alto Tribunal rechaza que el veto vulnere la libertad ideológica, pero anula por "inconcretas" expresiones como "con ropa similar al bañador"
El Tribunal Supremo ha declarado conforme a Derecho una normativa del Ayuntamiento de Barcelona que prohíbe transitar desnudo o en bañador por las calles de la ciudad y que había sido cuestionada por la Associació per a la Defensa del Dret a la Nuesa y por la Federación Española del Naturismo.
La prohibición --promovida por el consistorio ante la presencia cada vez mayor de turistas ligeros de ropa y que en su día levantó una gran polémica ciudadana-- cerraba las puertas de la ciudad a la práctica del nudismo o "casi nudismo" (sic) y del tránsito o permanencia en los espacios públicos en bañador u otra prenda de ropa similar y tipificaba como falta leve la persistencia en tales conductas después de ser advertido por los agentes de la autoridad.
El Supremo rechaza que la prohibición de la desnudez vulnere el principio de libertad ideológica establecido por la Constitución, tal y como argumentaban los recurrentes contra un fallo previo del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña que también validó la norma municipal.
"Por eso la entidad local puede limitar el ejercicio de tal actividad, prohibiéndola y sancionándola administrativamente, por estar habilitada por la Ley Reguladora de las Bases de Régimen Local y por afectar directa e inmediatamente a las relaciones de convivencia", dice la sentencia del Supremo.
El alto tribunal sí considera contrarias al principio de legalidad determinadas expresiones de la Ordenanza como "casi desnudo", "casi desnuda" o "con ropa similar al bañador". Las considera "excesivamente inconcretas e indeterminadas" y por tanto anula la Ordenanza en ese punto concreto, aun manteniendo la validez del conjunto de la norma.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.