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Rus aparca su televisión hasta después de las elecciones

La Diputación de Valencia prevé iniciar las emisiones en verano

La Diputación de Valencia no pondrá en marcha su televisión antes de elecciones. Su propio presidente, Alfonso Rus, dejó entrever ayer que no empezará a funcionar hasta el verano, con lo que, aseguró, se evitarían las suspicacias políticas que el proyecto ha suscitado desde su anuncio.

La mesa de contratación de la Diputación decidió el pasado día 12 conceder a la cadena privada Beovisión el contrato para la emisión de una franja horaria de informaciones relacionadas con la Corporación y los pueblos. Sin embargo, ello no obliga a su puesta en marcha hasta que no se formalice el contrato, que ya requeriría fijar una fecha para iniciar las emisiones.

Rus aseguró ayer en una entrevista en Levante TV que si existieran televisiones privadas de cobertura provincial la Diputación de Valencia no se hubiese planteado la posibilidad de impulsar un concurso para contratar una cadena privada, pero había que satisfacer la demanda tras el cierre de Ràdio Televisió Valenciana.

El presidente de la Diputación pretendía inicialmente que estas emisiones se iniciaran en enero y luego el desarrollo del proyecto ha ido acumulando retrasos consecutivos. No ha sido en febrero ni tampoco lo será en marzo.

El PSPV se opuso desde el primer momento a que la Diputación gastase dinero en el proyecto. Aparte de que entendía que resultaba “carísimo”, podía causar injerencias políticas y siempre consideró que la Diputación carecía de competencias para poder montar una televisión. Rus acusó a los diputados del PSPV de tratar de impugnar los presupuestos de la Diputación para retrasar la puesta en marcha del canal, que, sobre el papel, tiene previsto ofrecer solo contenidos suministrados por la propia institución. Rus llegó a comprometerse a evitar contenidos que levantaran suspicacias, sin embargo, no despejó la inquietud de quién tendría el control de la información, y con qué garantías, tratándose de un medio privado y dinero público.

Beovisión presentó una oferta de 2,68 millones de euros de contrato y 562.000 euros de IVA (en total, 3,242 millones. Esta cadena es propiedad del grupo Mecomlys, del empresario Ángel Raga, y carece de experiencia en el sector. Su capacidad de emisión es fruto del arrendamiento, por parte de Las Provincias TV SAU, de una de las dos licencias existentes para la prestación del servicio autonómico de comunicación audiovisual de la televisión digital terrestre (TDT).

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