Podemos asegura que Andalucía será la antesala del cambio político

Podemos pretende evitar que las polémicas les meta en un brete en su estreno electoral en Andalucía, las segundas elecciones a las que se presenta tras los comicios al Parlamento europeo. Eso significa por ahora dos cosas: que Juan Carlos Monedero, uno de sus fundadores, atropellado por sus ingresos facturados a Gobiernos latinoamericanos, no participará en la campaña andaluza. En segundo lugar, el debate sobre el modelo territorial abierto por dirigentes de Podemos de Cataluña, País Vasco y Galicia en el que se apuesta por la “asimetría” entre comunidades no toca ahora. Dicho esto, Teresa Rodríguez, la candidata a la presidencia de la Junta, ha asegurado este martes que “de ninguna manera abandonará” lo logrado el 28 de febrero de 1980 cuando Andalucía se equiparó con las llamadas comunidades históricas.

Podemos de Andalucía sale en esta campaña con la idea por la que ya han transitado todos los partidos con los que va a competir, la de presentarse como el “único partido que garantizar el cambio político” en Andalucía y de ser la avanzadilla de lo que ocurrirá meses después en las elecciones generales. Lo han dicho este martes Rodríguez y el jefe de campaña y secretario de Organización de Podemos, Sergio Pascual, en una concurrida rueda de prensa en el extrarradio de Sevilla en un espacio público de la Junta de Andalucía.

Los candidatos de esta formación se describen a ellos mismos como “gente preparada para hacer efectivo el cambio” y acabar “con la burocracia ineficaz” de 33 años del Gobierno del PSOE, partido al que no citaron. Tampoco al PP, aunque sí a sus líderes. “Susana [Díaz] está temblando y también [Mariano] Rajoy porque el cambio va a empezar en Andalucía”, proclamó Sergio Pascual. La campaña de este partido en Andalucía se va a centrar en las ocho capitales de provincia y en los 29 municipios de más de 50.000 habitantes. Creen que sus propuestas y mensajes calan más en las zonas más urbanas que en las menos pobladas. Casi justo lo contrario está haciendo el PSOE de Andalucía, con una implantación insuperable en todo el territorio andaluz, pero que por ahora está desarrollando la campaña de su candidata en los 694 municipios de menos de 20.000 habitantes.

El talón de Aquiles de Podemos en estos momentos es que casi nada se sabe de su programa electoral para Andalucía. Unos 150 expertos —entre ellos una treintena de economistas— están colaborando en redactarlo, pero por ahora los dirigentes de Podemos no pueden bajar al terreno de la concreción. Sí hay tres líneas apuntadas: las de garantizar recursos vitales (luz, agua) a los ciudadanos que lo necesiten y una renta mínima de inserción, propuestas que IU abanderó desde el Gobierno andaluz. Como el resto de los partidos abogan por un nuevo modelo productivo y medidas de transparencia pública para “superar la inercia de la política vieja”. La candidata a la presidencia de la Junta ha avanzado que las medidas serán lo “más rigurosas y concretas posibles” y se comprometió a “no vender humo”. Sobre las medidas de transparencia que está elaborado el abogado Juan Moreno Yagüe, número dos por Sevilla, ha asegurado que “van a sorprender por su novedad”.