El Maestrazgo pone de moda la música antigua

Mientras el Festival Internacional de Música Antigua y Barroca de Peníscola (Baix Maestrat) se acerca a su vigésima edición, el joven festival de música medieval y renacentista Early Music Morella, en la vecina capital de Els Ports, muestra signos de consolidación, al llegar a su cuarta edición. Asociado a un curso internacional que baraja cifras de 140 alumnos, procedentes de varios continentes, y una veintena de profesores, Early Music Morella contribuye a poner de moda en verano la música antigua, en un eje virtuoso que une la playa del Papa Luna y el escarpado castillo donde Sant Vicent Ferrer y el rey Fernando de Antequera intentaron resolver el católico Cisma de Occidente.

La cuarta edición, que se celebrará del 18 al 28 de julio, girará en torno al estudio y la interpretación de la mística, según ha puesto de relieve este miércoles en su presentación Carles Magraner, director de la Capella de Ministrers y del certamen. Se asocia así a las efemérides del quinto centenario del nacimiento de Teresa de Jesús y el séptimo de la muerte del teólogo  Ramon Llull.

Morella, el gran auditorio medieval

J. M. J.

En la Iglesia de Santa María la Mayor, construida entre 1265 y 1330 puede contemplarse el órgano histórico de Turull. Allí tendrá lugar el día 18 la primera  la audición del festival Early Music Morella, a cargo de Catherine King con Capella de Ministrers, bajo la dirección de Carles Magraner.  El 19 Ignasi Jordá ofrecerá un concierto de órgano.

Glen Vélez y Lori Cotler ofrecerán un concierto de percusión tradicional y ritmos vocales en el Teatro Municipal, también el día de la inauguración.  El Salón Gótico del Ayuntamiento será la sede el concierto El éxtasis de la vihuela, a cargo de Carlos González y Mabel Ruiz , y el dedicado al compositor Antonio Cabezón, del arpista Manuel Vilas, ambos el día 20. Al día siguiente, Begoña Olavide ofrecerá una audición de voz y salterio.

Los tres últimos conciertos se celebrarán en el Convent de Sant Francesc, los días 21, 22 y 23 de julio. Carles Dénia, Ahmed Sharif, Aziz Samsaoul, Ian Harrison y Eduard Navarro interpretarán música, danza y poesía sufí. El Ensemble Vocal y la Capilla Musical_Lab del curso se centrarán en la mística y el renacimiento español. Cerrará el ensemble de alumnos.

Al curso de interpretación de música medieval y renacentista se suma otro de música tradicional, con profesores como el guitarrista y cantador Carles Dénia o el dolçainer Eduard Navarro. Entre la docena de profesores del curso central se encuentran el propio Magraner, que enseñará  viola de gamba; la mezzosoprano inglesa Catherine King será la maestra de canto; la cantante e intérprete internacional de psalterio Paloma Gutiérrez enseñará canto gregoriano, el percusionista norteamericano ganador de varios gramys Glen Vélez, o el instrumentista de origen argentino Ariel Abramovich, especialista en vihuela, laúd y guitarra renacentista.

Los profesores serán también protagonistas de nueve conciertos que girarán en torno a la mística, el éxtasis o la danza de la muerte entre otros temas. El programa de música en directo arrancará en la imponente Iglesia Arciprestal de Morella y concluirá en el emblemático Convent de Sant Francesc con el concierto final de curso del alumnado. Fundado en 1272, el convento conserva un claustro gótico en cuya sala capitular se puede encontrar una pintura mural del siglo XV representando la medieval Dansa de la Mort, "motivo axial del curso desde su creación", según subraya Carles Magraner. 

En el acto de presentación que se ha celebrado en sede de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo de Valencia, el diputado provincial de Castellón José Luis Jarque ha destacado la singularidad de Morella por su rico patrimonio arquitectónico y su oferta turística y cultural, mientras que Vicent Llimerá, director del Instituto Superior de Enseñanzas Artísticas, ha propuesto opciones "para que los títulos del curso tengan la máxima repercusión para el asistente". El alcalde de Morella, Rhamsés Ripollés ha resaltado la apuesta de la población por "la cultura como motor económico".