Las posibles alianzas marcan el arranque electoral

Cuando aún quedan 45 días para que se celebren las elecciones autonómicas del 22 de marzo, el arranque de la precampaña está marcado por lo que ocurrirá el día después de los comicios. Es decir, por la posibilidad de acuerdos poselectorales para garantizar la gobernabilidad. La fragmentación del voto que apuntan las encuestas por la fuerte irrupción de Podemos en el escenario político está precipitando un debate que normalmente adquiere relevancia cuando los ciudadanos ya han acudido a las urnas.

El PSOE que dirige Susana Díaz parte como favorito en los sondeos, pero la mayoría absoluta no parece tenerla al alcance de la mano. Los socialistas están hablando de tener una mayoría suficiente para gobernar en solitario y están desechando cualquier posibilidad de pactar tanto con el PP como con Podemos. “Yo no podría ser presidenta apoyándome en un partido que atropella los derechos de quienes más lo necesitan”, ha dicho la presidenta de la Junta, en alusión al PP. Tampoco ve viable un acuerdo con Podemos, que “viene a Andalucía a insultar como hace la derecha”.

Los dos grandes partidos repudian cualquier pacto con la formación que dirige Pablo Iglesias. El candidato del PP, Juan Manuel Moreno, ha planteado este miércoles al PSOE un acuerdo para evitar la entrada en el Gobierno autónomo de Podemos en caso de que esta fuerza fuera decisiva tras las elecciones del 22-M. “Somos el único partido dispuesto a llegar a un acuerdo de gobernabilidad para evitar que Podemos entre en un Consejo de Gobierno”, dijo Moreno en una reunión con empresarios del sector turístico en Málaga. El líder del PP dio por hecho que si Podemos entra en el Gobierno se producirá “un éxodo de las inversiones” en Andalucía.

Izquierda Unida, todavía bajo el trauma de la ruptura del Gobierno de coalición con el PSOE, no cierra la puerta definitiva a pactos poselectorales. Podemos ha vinculado cualquier pacto en Andalucía con el PSOE a que este partido dé un giro radical a sus políticas.

PSOE y PP también se han enzarzado en torno a la idea de que gobierne la lista más votada tras las elecciones. Moreno ha pedido a los socialistas que digan cuanto antes si están dispuestos a “respetar” que gobierne el partido más votado y dio por seguro que él sí lo hará. La candidata socialista tildó esta propuesta de “ocurrencia” y añadió: “No va a tener ningún problema, creo que el PSOE va a ganar las elecciones y si eso es lo que él quiere, ya está”.