Jonan Fernández entrega a Bilbao el listado de víctimas de la violencia

El alcalde de Bilbao, Ibón Areso, ha recibido hoy un documento con el listado nominal de las 95 personas asesinadas en los últimos 50 años en Bilbao o que eran vecinos o nacidos en la villa, por ETA, grupos terroristas de extrema derecha o en "abusos" policiales. El documento, denominado Retratos Municipales de las Vulneraciones del derecho a la vida en el caso vasco 1960-2010, ha sido elaborado por la Secretaría General para la Paz y la Convivencia del Gobierno vasco, cuyo titular, Jonan Fernández, ha hecho entrega del mismo al regidor bilbaíno en el Ayuntamiento, informa Efe.

Se trata, según ha indicado Fernández en el acto, del "retrato de los rostros humanos del sufrimiento de cada víctima injustamente asesinada" por las distintas violencias habidas en los últimos 50 años en Euskadi y España.

El documento recoge "todas las vulneraciones del derecho a las víctimas con el nombre de cada una de ellas y, salvo error u omisión involuntaria, no excluye ningún asesinato ni a ninguna víctima", ha precisado Fernández.

De esta manera, aparecen 72 víctimas mortales atribuidas a las distintas ramas de ETA (militar y político-militar) y a los Comandos Autónomos Anticapitalistas; nueve atribuidas al GAL y al Batallón Vasco Español y siete atribuidas a actuaciones policiales. Incluye seis casos que, en palabras de Jonan Fernández, "necesitan de mayor contraste e investigación" para determinar la autoría y otro más de "autoría confusa".

Fernández ha agregado que el deseo de su secretaría es que estos documentos, que también se entregarán próximamente a los alcaldes de San Sebastián y Vitoria, "puedan ayudar a los ayuntamientos vascos a desarrollar políticas de memoria en sus respectivos municipios".

Ha apuntado que se va a hacer uno por cada municipio vasco donde ha habido alguna víctima mortal de este tipo, con lo que se elaborarán un total de 136 documentos que se espera tener terminados en mayo o junio y que serán entregados a los nuevos alcaldes salidos de las elecciones de mayo.

El alcalde de Bilbao, Ibón Areso, ha recogido el documento y ha anunciado que lo van a estudiar y que de ese estudio "pueda salir el ubicar o situar dentro de Bilbao los puntos donde ha habido algún tipo de fallecimiento motivado por la violencia".

Cuestionado sobre si el documento podría servir para colocar placas en cada lugar donde se produjo un atentado terrorista mortal en Bilbao, se ha mostrado "abierto" a "dar respuesta" a esta cuestión. Ha revelado que existe una partida económica reservada para ello en los presupuestos municipales de 2015, y ha apostado por abordar el asunto "de la forma más consensuada posible".

"El documento nos ofrece puntos de geolocalización de los atentados, pero el paso de poder colocar placas tiene que ser absolutamente consensuado con las familias de las víctimas", ha apuntado, y ha añadido que "no puede ser planteado de forma unilateral por este Ayuntamiento".

Ha justificado esta actitud en el hecho de que "puede haber familias que sí quieran tener una placa y familiares que lo que no quieren es ahondar en el recuerdo a través de esa placa". En cualquier caso ha resaltado que "la convivencia sólo puede asentarse sobre la memoria de lo ocurrido y en el respeto a las víctimas", aunque no se ha mostrado partidario de que ello se interprete como "la victoria de unos proyectos políticos sobre otros".

Ha reconocido también que puede haber familias de víctimas que no vayan a perdonar lo ocurrido a sus allegados pero, tras mostrarse comprensivo con esa posición, ha manifestado su deseo de que "desde el recuerdo, florezca una nueva Euskadi sin sed de venganza, con respeto y con libertad".