Tradicionàrius se pone a bailar

No solo música en directo, talleres y exposiciones. Ante la poderosa e incesante demanda de bailarines deseosos de disfrutar de sesiones de música especializada, el Festival Tradicionàrius añade este año a su ya amplia programación cuatro veladas monográficas de baile, las Nits de Ball Folk. Esas noches representan la gran novedad de la ya histórica (son 28 ediciones) manifestación dedicada a la música folk que arranca hoy con un concierto en la plaza de la Vila de Gràcia de Barcelona y que este año apuesta por cruzar fronteras y traer a Barcelona lo mejor de la producción folk internacional mediante la incorporación de actuaciones de grupos de Argentina, Colombia, Francia, Noruega, Portugal, Italia y Grecia. De ahí que la convocatoria de este año lleve por lema De Gràcia al mundo.

Medio centenar de actos y conciertos y la participación de más de 60 grupos conforman, a partir de un presupuesto de 150.000 euros, la oferta de una iniciativa que desde hace 28 años se ha convertido en una plataforma de difusión privilegiada del trabajo de intérpretes, autores y grupos de raíz popular y tradicional. “Pese a que muchas cosas hayan cambiado, Tradicionàrius pretende seguir dando visibilidad a un tipo de música que merece más interés y no debe ser relegado exclusivamente a unos pocos festivales”, lamenta Jordi Fàbregas, director de Tradicionàrius. Quizá como ratificación de esa voluntad de ser y del grosor musical del festival, este año pueden enorgullecerse de la participación del cantautor popular griego Thanasis Papakonstantinou. El Bob Dylan helénico, tal como ha sido considerado en las últimas décadas, actuará en la sala Apolo de Barcelona el 12 de marzo.

Más de 60 grupos y artistas conforman la participación de la 28ª edición, que tiene un  presupuesto de

Si la actual edición del Tradicionàrius mantiene la fórmula y los elementos básicos que le han permitido sobrevivir con éxito, como el habitual Folk en los mercados (que volverá a llenar de música en directo entre las paradas de los mercados de la Estrella y la Llibertat del barrio de Gracia), al mismo tiempo no faltan las producciones propias inéditas. Este año destacan, por un lado, la de Ovidi Popular, 20 años, que aspira a recuperar la obra de uno de los máximos exponentes y de los más añorados del movimiento de la Nova Cançó, Ovidi Montllor. Las voces actuales más representativas del folk catalán tejerán el próximo 20 de febrero un inédito homenaje al cantautor de Alcoi, a través de un espectáculo coorganizado con el festival BarnaSants. La otra producción será Folk Laietà-35 anys del disc Lo poder del cant i l'Harmònica Brava (5 de marzo en el Auditori de Barcelona), que desea conmemorar las tres décadas y media de un disco revisitándolo con una formación orquestal creada para la ocasión.

Una noche de la rumba y el vallenato con La Troba Kung-Fú y Antonio Rivas es otro de los atractivos de un festival que culminará el 27 de marzo con un concierto-baile a cargo del cuarteto Quico el Célio, el Noi i el Mut de Ferreries y La Cobla Catalana dels Sons Essencials.