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Sin luz ni taquígrafos en el epicentro de la trama púnica

La oposición de Valdemoro critica la falta de transparencia del PP

F. Javier Barroso
Registro en el Ayuntamiento de Valdemoro el pasado lunes.
Registro en el Ayuntamiento de Valdemoro el pasado lunes.sergio pérez (reuters)

Si algo critica la oposición del Ayuntamiento de Valdemoro (71.600 habitantes) es la falta de transparencia de su equipo de gobierno, del PP. Desde que entró a gobernar Francisco Granados, en 1999, y rompió el llamado cinturón rojo (municipios gobernados por la izquierda), los grupos se han quejado de que se les oculta información, en especial de los contratos que firma el Consistorio. El mayor beneficiado, según el PSOE, es David Marjaliza, amigo personal del exalcalde y exconsejero regional.

Los responsables de la oposición recuerdan cómo tres de los implicados en la Operación Púnica iniciaron sus andanzas políticas en Nuevas Generaciones de Valdemoro. Se trata de Marjaliza, Granados y del actual alcalde, José Carlos Boza Lechuga. Había un cuarto, el anterior regidor, José Miguel Moreno, pero no se presentó a la reelección en mayo de 2011.

David Marjaliza dejó la política y se pasó al sector inmobiliario. Poco a poco fue ganando notoriedad y mayor volumen de negocio. Ahora es “el constructor oficial” del Ayuntamiento de Valdemoro, al que se le adjudican la mayoría de los contratos directamente o a través de empresas interpuestas. “Muchas veces es difícil llegar a saber quién es el verdadero adjudicatario, porque hay un conglomerado enorme de empresas y unas se cubren a otras”, destacan fuentes de la oposición.

El alcalde accidental de Valdemoro, Manuel Salguero.
El alcalde accidental de Valdemoro, Manuel Salguero.

Los grupos de la oposición ni siquiera pueden participar en la Mesa de Contratación. Nadie que no sea del PP o técnico de esta área interviene. “Ni siquiera nos dejan estar como oyentes para saber qué se está tratando o a quién se le adjudica. Tenemos que estar pendiente de los decretos de alcaldía, pero, cuando ya están firmados, es tarde y no podemos hacer nada”, añade el portavoz socialista, Serafín Faraldos.

La fórmula que más elige el equipo de gobierno, según denuncia el PSOE, es el procedimiento negociado sin publicidad. Esto supone acudir directamente a una empresa que se haya ofertado como proveedor municipal, siempre que el montante del contrato no supere los 60.000 euros, sin incluir el IVA.

La junta de portavoces

La oposición pone varios ejemplos de posibles irregularidades, como la venta de una parcela municipal para construir un hotel en el barrio del Restón por debajo del precio de mercado, el hecho de que la mayoría de los empleados de los parquímetros estén vinculados con el PP o la concesión del restaurante del parque del Bosque por un canon anual de tan solo 17.000 euros al año. A ellos se suma la construcción de un gimnasio en un solar del Ayuntamiento situado en la avenida de España, junto a una conocida hamburguesería, por un exiguo canon anual de 1.750 euros y un periodo de explotación de 75 años. “Parece que todos tienen una gran familia, porque siempre se contrata a familiares de los responsables del PP en Valdemoro y muchas veces en puestos de gran responsabilidad”, destaca el portavoz socialista.

“Todos estos ejemplos nos llevan a pensar que durante muchos años han hecho lo que les ha dado la gana. Ante todo, se han creído impunes, además de insaciables”, resume Faraldos.

El PSOE ha acudido desde 2007 de manera reiterada a la fiscalía para denunciar las posibles irregularidades en varios contratos que le han resultado sospechosos. Pero la fiscalía siempre ha archivado sus denuncias o las han desechado argumentando que ya habían prescrito. Un procedimiento que el equipo de gobierno suele utilizar para ralentizar las investigaciones es demorar la entrega de los expedientes. Y ello pese a que la oposición tiene el derecho por ley de acceder a todos los expedientes municipales.

Un hecho sintomático de falta de transparencia para los grupos de la oposición es que la junta de portavoces lleva al menos tres años sin reunirse. La actividad de los concejales que no pertenecen al equipo de gobierno se limita a participar en las comisiones y en el pleno. De hecho, la incertidumbre se cierne ahora sobre la próxima sesión plenaria. En teoría debería celebrarse hoy, último jueves de mes, pero el desconcierto por las detenciones del lunes ha hecho que el actual alcalde accidental, Manuel Salguero Cornejo, no la convocara ayer.

Este periódico intentó recabar, sin éxito, la versión del equipo de gobierno sobre las acusaciones de la oposición.

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Sobre la firma

F. Javier Barroso
Es redactor de la sección de Madrid de EL PAÍS, a la que llegó en 1994. También ha colaborado en la SER y en Onda Madrid. Ha sido tertuliano en TVE, Telemadrid y Cuatro, entre otros medios. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, está especializado en Sucesos y Tribunales. Además, es abogado y criminólogo.

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