El recorte de profesorado sume en el caos al instituto de Viveiro

Los recortes en profesorado impuestos por la Consellería de Educación han llevado al caos al Instituto de Educación Secundaria (IES) Ponte Vilar, en Viveiro (Lugo). El empecinamiento de la consellería en negar, casi un mes después del comienzo de curso, un profesor de lengua castellana con el que inicialmente contaba la dirección — elaboró el horario académico incluyendo a ese docente— se ha saldado hasta el momento con la dimisión en bloque del equipo directivo electo —y el consiguiente nombramiento a dedo del sustituto—, con la docencia de la asignatura de castellano a cargo de dos especialistas en música y con una denuncia judicial contra dos madres de alumnos. La directora impuesta por la consellería —cuya candidatura había rechazado el claustro en su día— denunció a las representantes del Anpa. Las acusó de alteración del orden tras encontrarlas en los pasillos del instituto adonde habían acudido, según insisten ellas, con la intención de que alguien de la directiva les ofreciese soluciones. Lejos de ello, la denuncia agrandó el conflicto, que ha traspasado ya el ámbito educativo y llega al Parlamento a través de una moción de AGE y a las calles de Viveiro con movilizaciones de protesta.

El ANPA del IES Ponte Vilar no está dispuesta a renunciar al profesor de Lengua española. Y el gabinete que preside Jesús Vázquez no está dispuesto a concedérselo. No se atisba el acuerdo. Las portavoces del Anpa aseguran que tanto este colectivo como el grueso del profesorado (incluida la directiva dimisionaria) aceptaba en última instancia que profesores de lengua gallega impartiesen por afinidad las clases de castellano. “Pero ni siquiera eso ha aceptado Educación”, protestan las madres. “Lo hacemos lo mejor que podemos, pero conscientes de que no es el mejor nivel”, afirman los profesores que han asumido la asignatura, un licenciado en Historia de la Música y un diplomado en magisterio especializado también en música.

Los padres y a la mayoría de los profesores (38 de los 42 que tiene el centro) han registrado numerosos escritos en Educación reclamando el profesor pero no han tenido respuesta. El gabinete de Jesús Vázquez eludió contestar a las preguntas de este diario y se remitió a una nota de prensa en la que evita mencionar la falta del docente de castellano y llama a la “profesionalidad y voluntad de todos los miembros de la comunidad educativa” para que “faciliten que se lleven a cabo los horarios elaborados [por el equipo directivo nombrado a dedo] teniendo en cuenta las consideraciones de los profesores”. El ANPA se lleva las manos a la cabeza. Asegura que algunos alumnos han llegado a recibir a dos profesores en el aula a la misma hora como consecuencia de lo que consideran un “desastroso horario”.

Educación no se pronuncia expresamente sobre el profesor que reclaman docentes y Anpa, pero resalta en su nota de prensa que el IES Vilar Ponte tiene una dotación de profesorado “suficiente para dar respuesta a las necesidades” de sus 373 alumnos, con una ratio de “8,29 alumnos por profesor, cifra que lo sitúa por debajo de la media de los centros de la comunidad gallega (10,3) y de la provincia de Lugo”. Y atribuye al centro 45 docentes, entre los que incluye a los dos pedagogos y al profesor de Religión compartido con otro instituto. La consellería matiza finalmente que “en cualquier caso, queda abierta, tal y como marca la normativa, la posibilidad de que el profesorado presente consideraciones que serán revisadas por la inspección educativa”. La misma a la que padres y profesores sostienen que han recurrido sin éxito hasta el momento.

Padres, docentes y vecinos de Viveiro se echaron ayer a la calle en manifestación para pedirle a la Consellería de Educación que “recapacite y reaccione”. “Sin querer ser más que nadie, creemos que debe dotar a este centro de las necesidades mínimas para garantizar su futuro”, exigen. El ANPA reclama “sentido común” a Educación y avanza que no va a cejar en su demanda.