Vallecas, cita entre necesitados

Septiembre, y en Vallecas ya hay un partido de urgencias. Un pésimo arranque de Liga obliga a Rayo Vallecano y Athletic a buscar cuanto antes la primera tabla de salvación y enderezar el rumbo. En una semana sin posibilidad de reflexionar con tres partidos, los dos equipos pugnan en un escenario que siempre se le ha dado mejor a los rojiblancos.

El Athletic acude a Madrid en una situación que parecía haber olvidado desde hace mucho tiempo. Está muy cerca de los puestos de descenso y, además, tiene el doble compromiso de seguir mirando a una Champions League que ha ilusionado a su afición tras la noche mágica del Nápoles y el final de la pasada campaña.

La derrota ante el Granada de Caparrós ha extendido la preocupación dentro y fuera de la plantilla. Ernesto Valverde exprimió al máximo las rotaciones con seis cambios en el habitual equipo titular y el experimento hizo aguas más allá del marcador final. La posibilidad de disponer de un mayor fondo de armario para competir con garantías se ve cuestionada a las primeras de cambio.

Bajo ese ánimo de intranquilidad, el Athletic busca la reacción cuanto antes porque sabe que el sábado le visita un Eibar con todo por ganar y nada que perder en San Mamés. Así, el duelo ante el Rayo en un campo donde los seguidores bilbaínos siempre son bien recibidos por la afición local cobra mucho más dramatismo del que podría imaginarse en el primer mes del calendario.

Hace cinco meses, el Athletic logró en Vallecas el triunfo para ir a la Champions

Enfrente no están mucho mejor las cosas porque el Rayo no conoce la victoria, aunque plantó cara al Atlético, pero se le escaparon los puntos ante el Elche en casa. Además, ha encajado diez goles en cuatro partidos y en todos los encuentros concede muchas ocasiones por errores propios.

"Hay que buscar los mecanismos para encajar menos goles", admite el técnico Paco Jémez, preocupado por esta situación y consciente de que "se empezará a ganar cuando el equipo encuentre el equilibrio" entre los aspectos defensivos y ofensivos.

Para el partido de este miércoles, el Rayo solo tiene las bajas del central Antonio Amaya, que se recupera de una rotura en el tendón del aductor mediano del muslo derecho, y el portero David Cobeño, que sufre molestias en la rodilla derecha. La buena noticia para Jémez es que recupera al centrocampista internacional mexicano Javier Aquino y al delantero gallego Jonathan Pereira, que no pudieron estar la última jornada frente al Villarreal al tener una cláusula en su contrato de cesión que les impedía enfrentarse a su exequipo.

En el recuerdo amable del Athletic, hace cinco meses celebraba por todo lo alto en el campo madrileño el triunfo que le garantizaba la cuarta plaza y le ha permitido jugar esta temporada la Liga de Campeones. Ahora también le puede la necesidad de puntuar, pero es mucho más perentoria que entonces.