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Elisa Díaz llorando: “No le deseo a nadie lo que estoy pasando”

La diputada del PP imputada por lesiones dice que todo es un montaje y "seguiré trabajando"

Alicante -
La diputada Elisa Díaz saluda al rector de Alicante.
La diputada Elisa Díaz saluda al rector de Alicante. PEPE OLIVARES

La diputada autonómica del PP Elisa Díaz González ha dicho hoy, entre lágrimas, que no le desea, ni a su "peor enemigo", pasar por su situación, en alusión al procedimiento judicial abierto contra ella por un posible delito de lesiones imprudentes por una supuesta agresión a una mujer británica.

La también hija del exalcalde de Alicante Luis Díaz Alperi ha hecho estas declaraciones, a preguntas de los periodistas, tras asistir al solemne acto de apertura del curso 2014-2015 de la Universidad de Alicante (UA), en el campus de San Vicente del Raspeig.

El auto de la Sala de lo Civil y lo Penal remitido ayer por el Tribunal Superior de Justicia valenciano procesa a Díaz González por una falta de lesiones en concurso con un delito de lesiones imprudentes y a la víctima se le imputa, a su vez, una falta de lesiones hacia la diputada.

Los hechos ocurrieron en un albergue de animales en 2013 y, a finales del pasado julio, el magistrado que investiga la supuesta agresión rechazó la petición de archivo de la causa formulada por la aforada, diputada por Alicante desde la pasada legislatura.

Ante la pregunta sobre si los hechos son verdad y de cómo se ha presentado hoy en el acto de la UA, Díaz González ha manifestado, siempre entre lágrimas, que ella "tiene que seguir trabajando", a pesar de que le cueste "porque están mintiendo".

"No le deseo a nadie, ni a mi peor enemigo, lo que estoy pasando", ha agregado. También ha afirmado que no puede "llegar a entender" cómo se ha llegado a esta situación.

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"Yo a esta señora no la toqué y, encima, tuve que aguantar que me insultara, me escupiera y me pegara", ha manifestado. Cuestionada sobre cómo ocurrieron los hechos, ha señalado que "no fue nada más que una discusión de organización del albergue".

"Creó una situación de peligro que yo le pedí que rectificara, que no la hiciese", pero, al parecer, a la supuesta agredida "no le gustó que le quisieran rectificar", ha señalado. También ha asegurado que no conocía a la mujer británica, pero que le dijeron que "era conflictiva, que muchos voluntarios se habían ido por su culpa".

"Y me pasó a mí, me pasó a mí", ha reiterado sin parar de llorar. Aun así, Díaz González ha insistido que en que va a seguir trabajando y que ahora sólo queda "confiar en la Justicia". "Más no puedo hacer, no puedo demostrar de otra manera que esta señora ya tenía esa lesión", ha declarado, al tiempo que ha añadido que no niega que ésta exista, pero que, según le dijeron todos en el albergue "el oído ya le dolía".

Sobre el ambiente que se crea con esta situaciones cuando afectan a un cargo público, ha indicado que no está en su mano cambiarlo. "Yo he hecho lo que tenía que hacer. No puedo hacer nada más", ha añadido.

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