Alberto Fabra cita a los agricultores para sofocar su malestar ante el veto ruso

Diez días después de que los agricultores exigiesen una reunión con el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra recibirá a las principales organizaciones agrarias para intentar sofocar el malestar existente por la pasividad del Consell ante el bloqueo ruso a las importaciones de fruta europea y la grave sequía. Sin embargo, Fabra no abrirá a los agricultores las puertas de la Generalitat, sino las de la sede regional del PP para dar cabida en la reunión al europarlamentario Esteban González Pons, junto al vicepresidente y consejero de Agricultura, José Ciscar, y la consejera de Infraestructuras y coordinadora regional del partido, Isabel Bonig.

El pasado 14 de agosto, el propio presidente de la Asociación Valenciana de Agricultores, Cristóbal Aguado, un hombre muy próximo al PP, expresó su descontento, sin citarlo, con la actuación del Consell. Aguado pidió a los representantes políticos que se dejen de que “si agosto es un mes de vacaciones, porque se está en el trabajo cuando hace falta" y las reuniones son cuando hacen falta”.

Las declaraciones de Aguado se produjeron tras una reunión del secretario general del PSPV, Ximo Puig, con los dirigentes de las principales organizaciones agrarias, cooperativas y el comité de gestión de cítricos. Al término de la misma reunión, el secretario de la Unió de Llauradors, Ramon Mampel, instó al presidente de la Generalitat a recibirlos.

Desde entonces, los representantes de las organizaciones se han reunido con la práctica totalidad de las fuerzas parlamentarias, a excepción del PP que tomará hoy nota de las reivindicaciones de los agricultores.

Compensación irrisoria

Ayer, la Unión de Llauradors volvió a manifestar su malestar con las compensaciones previstas por la Unión Europea respecto al veto ruso. Para la Unió la cantidad que podrán recibir los productores valencianos de melocotones y nectarinas afectados por el cierre de las fronteras rusas es “irrisoria”.

Según esta organización agraria, la UE ha acordado conceder 29,7 millones de euros a todos los productores para la retirada de ambas frutas y tres más para promoción y solo se podrán beneficiar los asociados a una organización con 0,27 céntimos por kilo, que no cubren ni el 75% del coste de producción.