Orozco defiende los servicios mínimos en la basura anulados por un juez

Van ya 56 días de huelga de basuras en Lugo, sin visos de solución, y el gobierno municipal socialista insiste en defender su actuación durante el conflicto. El alcalde, Xosé López Orozco, no se arredra por el varapalo judicial recibido el pasado viernes, cuando un juez anuló los servicios mínimos del 100% decretados el pasado 22 de julio al considerar que limitaban el derecho a la huelga sin que los riesgos sanitarios aducidos por el ejecutivo local justificasen esa medida. Orozco anunció ayer que el Ayuntamiento recurrirá el fallo judicial e insistió en defender la dimensión de los servicios esenciales impuestos a los huelguistas.

 “Hay que darse cuenta de que en la ciudad fueron aumentando los puntos de alerta sanitaria”, comentó el alcalde en una entrevista al programa Hoy por hoy de la Cadena SER. “La ciudad estaba en un estado deplorable y nosotros teníamos que recurrir a alguna medida, una medida de choque como la del 100%. Pero luego, en el mismo decreto, decíamos que paulatinamente se irían bajando esos servicios mínimos”. Orozco considera su deber recurrir la sentencia desfavorable del Juzgado de lo Contencioso número 1 de Lugo, ya que, argumentó, el gobierno municipal tiene “la obligación de que los lucenses vivan en las mejores condiciones posibles”.

Mientras, la empresa Urbaser, concesionaria del contrato de limpieza viaria, acusó ayer al comité de huelga de impedir que seis de los miembros de la plantilla regresen al trabajo tras casi dos meses de paro. “Media docena de empleados se han presentado a trabajar, a lo largo del fin de semana, en distintos turnos. Correspondían a turnos de trabajo, no a los servicios mínimos. Y quieren ejercer su derecho al trabajo, igual que existe el derecho a huelga”, declaró Benito García, portavoz en Lugo de Urbaser, empresa del grupo ACS. “Por parte de la empresa no tenemos más que condenar que el comité de huelga esté impidiendo ese ejercicio del derecho al trabajo. Son trabajadores de Urbaser Lugo, independientemente de su militancia en uno u en otro sindicato. La empresa tratará de velar porque puedan realizar su actividad”, advirtió el representante de la compañía.

Tras la anulación del decreto que fijaba los servicios esenciales en el 100%, el portavoz de la empresa sostiene que los huelguistas vuelven a incumplir los mínimos que rigen ahora. La decisión judicial ha implicado que vuelva a entrar en vigor un decreto municipal del pasado 7 de junio, en el que se prevén unos servicios mínimos que oscilan entre el 40% y el 70% por ciento, según las zonas de la ciudad y el tipo de desperdicios. “El comité de huelga permite la salida de menos del 50% de los efectivos que se corresponden a esos servicios mínimos. Se generan más residuos y como consecuencia de ese incumplimiento hay que declarar nuevos puntos de emergencia sanitaria”, acusa la dirección.

Los trabajadores lo niegan. Según el secretario del comité de empresa, Julio Pacio, los servicios esenciales se cumplen y se está retirando basura en aquellos puntos donde se ha decretado la alerta por riesgo sanitario, que el fin de semana llegaron a 57. “Es curioso que haya compañeros que van al punto de riesgo sanitario que nos da la empresa todos los días y en todos los turnos y que se encuentren con los contenedores vacíos. No sé donde existe la coordinación. El domingo había 57 y se atienden rápidamente con estos tres turnos de trabajadores que salen a recogerlos, por lo que la ciudad no se debería resentir”, señala Pacio. Durante el fin de semana, se recogieron 36.000 kilos de desperdicios el sábado y más de 30.000 en la jornada del domingo.

Las dos partes se encuentran a la espera de una nueva llamada del mediador nombrado por el Consello Galego de Relacións Laborais para tratar de desbloquear las negociaciones.